Ja,ja,ja. Esa es buena Fran, el sombrero es la clave.
Dudas.
¿El quebradero de platos fue motivo para que el jefe, le descontará de su sueldo, le salía más caro el caldo que las albóndigas, aprovechó para presentar su renuncia y hacer mutis?
Quizá todavía estaba medio despistado con las ideas en fuga, por eso el resbalón en el asunto de la discreción... Aunque George, bien pudo sugerirle el camino adecuado, que él, no haya tomado el consejo, es otro asunto.
Nivel de locura.
Demencia a conveniencia.
Alternativas.
Albert y los hombres ¨sospechosos¨, se reúnen a tomar un trago en un bar de la localidad, usando ropas de diario, normal, como si salieran de trabajar, pasando el rato.
Regalo.
Bueno,si va a estar en un bar, por lo menos deberá probar la bebida, para cubrir las apariencias, y no despertar sospechas, vecinos chismosos te encuentras en cualquier lugar. Los chicles son para disimular el aliento no vaya a creer Candy, que Albert se ha aficionado al alcohol.