China: este año y el que viene
Por Orestes Martí.
En este repaso por el año 2019 y algunas pinceladas
de lo que se avecina en el próximo 2020, toca su turno a uno de los
principales polos del nuevo mundo multipolar que se dibuja cada vez más
nítidamente: la República Popular China.
Ayer leímos sobre una interesante visita al gigante asiático
-reportado desde la República de Corea por la
Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina- que comparto
con nuestros lectores:
Líderes de Surcorea y Japón a China para cumbre trilateral
Seúl, 23 dic (Prensa Latina) Los mandatarios Moon Jae-in (Corea del
Sur) y Shinzo Abe (Japón) viajaron hoy a China para
analizar temas económicos, regionales e internacionales en su octava
cumbre trilateral con el primer ministro anfitrión, Li Keqiang.
Ambos líderes primero harán una escala este lunes en Beijing,
donde el presidente Xi Jinping los recibirá por separado, y más
tarde seguirán su viaje a Chengdu pues será la sede mañana de la
cita entre las tres potencias asiáticas.
Según lo anunciado, Li conversará este lunes con Moon y Abe como
antesala de la reunión.
Aparte, los dignatarios visitantes aprovecharán la estancia en
territorio chino y dialogarán mañana sobre el conflicto
económico-comercial que enfrenta a sus países.
Previo a la cumbre, se decidió ayer en un encuentro ministerial acelerar
las pláticas para establecer en 2020 un área de libre comercio y
sellar un acuerdo de asociación económica China-Corea del Sur-Japón.
Entre otras cuestiones, también se determinó fortalecer la integración,
conectividad y cooperación energética en la zona, así como trabajar en
conjunto a favor de la paz, la estabilidad y prosperidad mundial, y
contra el proteccionismo y el unilateralismo.
Foto PL |
Sobre el pasado año, Yolaidy
Martínez, corresponsal jefa de la propia Agencia Prensa
Latina en China, en su artículo 2019,
un año complejo para la economía de China, expone:
Beijing (Prensa Latina) El 2019 fue para la economía de China uno de los
años más complejos, pues llegó y se despide en medio de desafíos y
presiones a lo interno y externo que ponen a prueba su resiliencia.
Desde enero el país vio una agudización de la guerra comercial desatada
por Estados Unidos y que implicó mutuas alzas de aranceles sobre un
importante número de mercancías.
Ambas potencias todavía buscan -entre avances y retrocesos- un acuerdo
que sepulte el conflicto, pero son negociaciones difíciles con muchos
escollos por superar y el añadido de maniobras injerencistas de
Washington que adicionan peso a las tensas relaciones con Beijing.
Aparte del conflicto tarifario, la Casa Blanca recargó con artillería
pesada la ofensiva contra Huawei y otras firmas líderes del sector
tecnológico chino, al restringir sus operaciones con socios y clientes
norteamericanos.
En lo doméstico, la nación asiática lucha contra una epidemia de gripe
porcina africana que conllevó a sacrificar millones de cerdos y, en
consecuencia, un aumento en las importaciones de esa carne y en la
inflación, por el encarecimiento del alimento.
Al cierre del tercer trimestre de 2019, el Producto Interno Bruto (PIB)
de China se desaceleró del 6,4 al 6,2 por ciento, mientras hubo un
discreto crecimiento interanual en el comercio exterior de 2,4 puntos y
en los servicios de 2,6.
Muchos interpretan esos datos con inquietud, pues también existe como
precedente un 2018 desfavorable y donde la expansión de la economía
china fue de 6,6 por ciento.
Se trató del menor auge anual registrado desde 1990, pero aún así fue
superior a la meta gubernamental de 6,5 puntos; China siguió al frente
en ese aspecto de las principales cinco potencias del planeta y
contribuyó con el 30 por ciento del PIB mundial.
Consciente de todas las adversidades, el Gobierno y el Partido
Comunista (PCCh) siguen centrados en desarrollar nichos que
garanticen un crecimiento sostenible.
Por tanto, la prioridad es corregir problemas, controlar riesgos y
concentrar esfuerzos en aquellas áreas que contribuyan a un progreso
estable, sólido y sostenido pero, sobre todo, sin peligros para la
seguridad alimentaria, médica y el bienestar general del pueblo.
De ahí la apuesta por una mayor apertura de su mercado, pues asegurará
la entrada de inversiones, bienes y productos extranjeros de alta
calidad para estimular el consumo interno, cuyo papel es cada vez más
relevante.
En ese contexto, el Gobierno introdujo reformas profundas en todo el
aparato institucional destinadas a flexibilizar procedimientos, reducir
impuestos y eliminar el exceso de capacidad en industrias como la del
carbón y acero, las más contaminantes.
También juega un papel primordial la Exposición Internacional de
Exportaciones e Importaciones, consolidada como una plataforma para los
negocios entre el empresariado chino y del mundo.
Una reunión celebrada este diciembre para delinear la agenda económica
del año próximo, determinó que permanece inalterable el nivel de
crecimiento en 2019 del PIB del seis al 6,5 por ciento. |