¿Por qué la pasividad popular ante la subversión?
Eduardo Mackenzie
Subversión y pasividad popular
Por Florence Comès
Para Dreuz Info, New York
https://www.dreuz.info/2023/01/subversion-et-passivite-populaire-276660.html#respond
Adaptación y traducción de Colombian News
12 de enero de 2023
A menudo surge la pregunta en los comentarios de Dreuz Info: ¿cómo explicar la apatía de los ciudadanos franceses e incluso estadounidenses? ¿Por qué la población permanece indiferente ante la vulneración de sus derechos, de la ecología punitiva o de los delirios wokistas? Una hipótesis interesante se encuentra en el libro La subversión, del profesor Roger Mucchielli (1), publicado en 1971. Según este autor, “la mayoría silenciosa es una creación de la subversión.”
I. Las causas de la “neutralización” del pueblo
Podemos enunciar dos razones principales, siendo la segunda consecuencia de la primera: la acción de los terroristas y el desprestigio del Estado.
El término terrorista debe tomarse en un sentido muy amplio. Designa a los autores de acciones directas restringidas y dirigidas sobre todo a tener un impacto psicológico. No hay necesidad de muertos: basta una bomba frente a un lugar simbólico, un destrozo, una manifestación violenta o una paliza. Lo importante es marcar los ánimos gracias a la resonancia en los medios.
El Estado no sabe cómo reaccionar ante esas operaciones. Si arresta a los culpables, los subversivos acudirán a los medios para indignarse y denunciar la represión y la dictadura. Eso es una victoria para ellos y la usan para justificar su lucha y atraer nuevos activistas y simpatizantes. Si, por el contrario, el Estado no se opone a las provocaciones, se muestra débil. Las agresiones quedan sin respuesta y son seguidas por otras, a menudo más violentas. La impunidad que muestran los terroristas les da un aura de fuerza, desencadena el miedo y también permite la captación de nuevos seguidores, sinceros u oportunistas. En ambos casos, el Estado es desacreditado.
II. Los efectos de esta situación en las masas
Los ciudadanos ya no confían en el Estado, ni en sus defensores como la policía. Cada quien se siente aislado e indefenso y “solo se preocupa por sus intereses privados. Ahora, “se niegan a comprometerse y exponerse… Así, la indiferencia y apatía aparentes esconden una fuerte decisión de no comprometerse”, explica Mucchielli.
Esa actitud se desarrolla tanto más cuanto que los partidos políticos de oposición también son víctimas de la subversión. A través de agentes infiltrados internamente y/o mediante el uso de ambiciosos o de “almas bellas” ingenuas, los subversivos enfrentan los adherentes de esos partidos unos contra otros. También los desacreditan externamente utilizando sus cómplices en la prensa o de otra manera.
Privada de todo recurso fiable contra los terroristas, la población siente un "pánico mudo". Descrito por Baschwitz, “el pánico mudo… es la expresión colectiva de la yuxtaposición separada de las inseguridades individuales. Ese pánico mudo aísla a las personas, es un fenómeno excepcional característico. La conducta individual (…) es dominada por el deseo de evitar toda manifestación personal y de toda iniciativa, por el miedo a hacerse notar”.
“En este estado, dice Tchakhotine (2), uno puede ver asambleas que toman decisiones aberrantes o inmundas” si las propone un agente del terrorismo. Esto también nos lleva a la negativa a declarar o denunciar y a “hacer como que no vemos nada”, aunque estemos en una situación ventajosa frente a los alborotadores.
“Estos comportamientos de pánico mudo son objeto de auto justificaciones y de racionalizaciones secundarias: como querer estar ‘por encima de la refriega’, ‘no estar suficientemente informados para poder juzgar’ (…) y pensar que ‘quizás esos terroristas no están del todo equivocados’”. Este efecto es previsto y deseado por los subversivos. Más allá de sus declaraciones manipuladoras sobre su “amor por el pueblo", su objetivo es "obtener el silencio de la gran mayoría". Así podrán tomar el poder sin correr el riesgo de enfrentar una oposición popular.
III. El impacto de las nuevas tecnologías de la comunicación
La citada obra de Roger Mucchielli data de 1971 (con una reedición en 1976). El enfatiza el papel y la necesidad de los medios de comunicación modernos en la eficacia de la subversión: “Los medios de comunicación son capaces, por sí solos, de fabricar una opinión pública (...) sin que haya una multitud reunida (...). Actúan sobre cada individuo en particular y en forma aislada, mientras crean al mismo tiempo fenómenos colectivos”.
Desde entonces, los medios de información y comunicación se han multiplicado para mayor beneficio de los terroristas subversivos. Ahora es aún más fácil para ellos crear un pánico silencioso en la población.
Piense en Internet. Este les permite dar a conocer sus acciones a la opinión pública sin necesidad de un relevo primario en la prensa. La más mínima manifestación puede así tener un impacto en un país o al otro lado del planeta. Ese es el objetivo. La frecuencia de los letreros en inglés, incluso en países de habla no inglesa, da fe de ello.
Los teléfonos móviles, con su medio de comunicación grupal, permiten la rápida reunión de grupos de subversivos, a la menor manifestación de los opositores. Del mismo modo, durante un ataque o una simple disputa, sabemos que el agresor puede obtener muy rápidamente muchos refuerzos a través de mensajes.
En cuanto a las redes sociales, éstas les dan a los subversivos una nueva arma para intimidar a la población: el doxxing. Solo tienes que decir una palabra no políticamente correcta frente a un simpatizante de una causa para que se desate el infierno: divulgación en las redes sociales de tu identidad y de tu dirección, o incluso la de tu familia. Con las consecuencias de acoso, pérdida de empleo, etc.
A 50 años de la publicación de La subversión, podemos ver la efectividad de esa táctica. La apatía de las poblaciones occidentales es flagrante. Pero, ¿cómo sorprenderse? Están continuamente sometidas a la acción de los subversivos y de los propagandistas de izquierda, islamistas o ecologistas. Peor aún, la situación ha empeorado desde principios de la década de 1970: hay una infiltración masiva de ideólogos en las instituciones estatales (en el FBI, por ejemplo). El Estado ya no es simplemente impotente, es cómplice.
(1).- Roger Mucchielli, La subversion, CLC, Paris, 1976.
(2).- S. Tchakhotine, Le viol des foules par la propagande politique, NRF, 1952.
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¿Cuántas “supraconstituciones” para la “paz total”?
Por José Alvear Sanín
La Linterna Azul, Bogotá
http://www.lalinternaazul.info/2023/01/12/cuantas-supraconstituciones-para-la-paz-total/
12 de enero de 2023
Para unos, entre gobierno y Eln hay crisis; para otros, apenas un malentendido. Pero en ambos casos se lamenta ese aparente tropiezo en el proceso hacia la “paz total”, cuando lo preocupante es la decisión de entregar el país, mediante ese subterfugio, a cinco “estructuras violentas”.
Desde luego, el proceso con el Eln es el más aterrador. Así como entre Farc y Juan Manuel Santos había completo entendimiento desde antes de iniciar conversaciones en La Habana, es presumible que entre el Eln y Petro haya completo acuerdo desde antes de Caracas, o de cualquier otro lugar del mundo donde se reúnan.
Los seis años de simulacro de discusiones eran necesarios para hacer creer que se “negociaba”, en vez de entregar el país inmediatamente. Requería Santos tiempo suficiente para socavar y debilitar a las Fuerzas Armadas con el frecuente cambio de sus cúpulas, y para completar la toma mamerta de las “altas cortes”.
Ahora hay que hacer creer al país que entre el gobierno y el Eln hay diferencias, cuando tanto el uno como el otro están identificados como actores revolucionarios de obediencia castrista. Por esa razón es preciso disimular, para que ambas partes aparezcan como contrapuestas, cuando en realidad tienen un objetivo común. Lo que no sabemos es cuántas más tretas y cuántos meses serán necesarios para hacer bien creíble el inexistente contrapunto entre ambos actores de la conjura.
Tanto el expresidente Andrés Pastrana —cuya franqueza denunciando las verdaderas motivaciones de Petro es laudable—, como María Isabel Rueda —columnista siempre bien informada—, consideran que el proceso con el Eln terminará en acuerdo para reunir una Constituyente.
Esta hipótesis es probable pero no necesariamente concluyente. Para convertir a Colombia “legalmente” en un estado marxista-leninista, aunque una Constituyente sumisa y complaciente es un buen mecanismo, hay algo más expedito, otra “supraconstitución” (como la que lograron las Farc en el tal “acuerdo final”), con el fin de completar lo que falta para el absoluto triunfo “jurídico” de la revolución.
Después de la aprobación, en 2016, mediante una mera proposición en las Cámaras del “acuerdo” con las Farc (de 312 páginas), negado por el pueblo, el Artículo 374 de la Carta quedó como el vago recuerdo del estado de derecho. Cuando este regía, la Constitución solo se podía reformar por el Congreso, por una Asamblea Constituyente o por Referendo. En cambio, con el “acuerdo final” se modificaron centenares de normas legales, violando en todos los casos la Constitución, para beneficiar la subversión y paralizar al Estado. Ese espurio “acuerdo” inconstitucional, auténtico macrogolpe de Estado, ha sido aplicado rigurosamente tanto por su autor, Junan Manuel Santos, como por Iván Duque, y ahora por Gustavo Petro.
Repito que no sabemos cuántos meses tardará en producirse el acuerdo Petro-Gabino, ni de cuántos centenares de páginas constará, pero no ignoramos que irá mucho más allá de lo convenido por Santos-Timochenko. Será otra supraconstitución, radical e inflexible como sus dos autores, pero no será sometida al azaroso proceso plebiscitario. Bastará con una proposición untada de mermelada para que otro Congreso prevaricador hunda a Colombia definitivamente en el abismo revolucionario.
Después de surtida esa horrenda trapisonda, los cambios constitucionales y legales (empezando por la Presidencia vitalicia de Petro) tendrán lugar en la República Popular, Democrática y Bolivariana de Colombia, hermana de Venezuela y Protectorado Cubano.
¡Desde luego, también habrá mini-supraconstituciones para complacer a las otras cuatro “estructuras” invitadas a la “paz total”!
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Maduro, el jefe de Petro
Por Juan Gómez Martínez
El Colombiano, Medellín
12 de enero de 2023
El presidente de los colombianos ha dado muestras de “no me importa”. Ya se ha vuelto repetitivo que llegue tarde a sus compromisos y las excusas no se han visto por ninguna parte. No le cumplió a las altas cortes para darles posesión a unos magistrados. No se han escuchado sus excusas o su explicación a esta muestra de descortesía. A la vicepresidente le llegó cinco horas tarde para un compromiso de máximo interés para ella, ya que era en su tierra.
Pero, a su máximo jefe, el presidente del país vecino, Nicolás Maduro, le llegó como un relojito bien calibrado. A él, a quien admira y respeta tanto, sí le cumple como debía hacer con todos. Allí sí entiende que sería una falta grave, de respeto, el no cumplirle. A Maduro, que es su jefe y guía, lo respeta como tal y le cumple, lo que no hace con los colombianos.
Es que Petro pareciera que tuviera más compromisos con sus colegas del exterior, que con los colombianos a quienes les debe el triunfo. Ya ganó y ya los puede irrespetar. Para nuestro presidente son más importantes sus colegas de la extrema izquierda, que sus conciudadanos. Esto se refleja en los contratos, en las relaciones internacionales y en muchos otros aspectos.
Para los aviones de combate, los fabricados por los israelitas, los descartó de plano. A pesar de que llevamos años con los Kafir, con buenos resultados, ni siquiera los tuvo en cuenta para su estudio. Buscó por otros lados y esperamos que no se equivoque en la adjudicación. Me imagino que estaba pensando en los rusos, pero con la guerra adelantada contra Ucrania, no ha sido posible el estudio de esta opción. No sé si los chinos fabrican esta clase de aeroplanos, pero me imagino que, para él, serían los más atractivos. Es que los gobiernos de izquierda están apoyando económicamente a estos orientales para crecerlos y ser la competencia de los Estados Unidos, ya que sus enemigos, los norteamericanos, están descartados desde un principio.
Petro no quiere las vías para el desarrollo, las 4G. Prefiere seguir en el subdesarrollo. Esa es su consigna. Dice que esas vías sirven solo para traer las mercancías para los ricos. No le cabe en la mente que esas buenas carreteras sirven para el desarrollo, para transportar los bienes de exportación, para importar bienes de consumo para todos los colombianos, para el transporte rápido de trabajadores, de estudiantes que deben moverse de un punto a otro. Tan es cierto esto, que, en este principio de año, hemos visto los terminales de transporte colmados de colombianos y no propiamente de los oligarcas, cómo él llama a los que trabajan por el país y por toda su gente.
Pero ese es el presidente que eligieron los desorientados y es a quien nos tenemos que aguantar hasta cuando nuestra democracia diga otra cosa. No queremos un mandatario que prefiera ser fiel a su política, antes que serlo a unos colombianos que necesitan de un buen gobierno.
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Colombia: 270 grados de preocupación
Por John Marulanda
https://www.jmarulandam.com/post/270-grados-de-preocupaci%C3%B3n
12 de enero de 2023
La situación de seguridad en Colombia, a comienzos de este 2023, sigue complicada a pesar de la anunciada paz total. Una contraorden del Ejecutivo, firmada por el Presidente y su Mindefensa, manda de nuevo a los militares a cumplir con la misión para la que han sido entrenados: atacar al eln. No sabemos si es una retaliación o una intimidación o una advertencia. Y mientras los militares “planean” qué hacer, los policías no la están pasando mejor. La institución ha difundido por las redes la inconformidad de 3000 agentes llamados a presentar un examen del Icfes, organización que reconoció a través de un comunicado de prensa que: “se dispuso de la respectiva verificación del proceso, identificando el pasado 5 de diciembre una falla técnica en el cargue y procesamiento de una de las variables…”. También son los casos de los policías que abandonaron estación en San José de Urama, Dabeiba, Antioquia, por falta de garantías para su seguridad y los de Policarpa, Nariño, quienes permanecen encerrados en su cuartel debido a la presencia de hombres y mujeres armados de alguna de las 19 estructuras que delinquen en ese departamento. En solo 11 días de enero ya se han registrado por lo menos 3 masacres en Nariño, Cauca y Cesar, sin contar los sicariatos urbanos y el abortado intento explosivo contra la vicepresidenta.
En Perú, Dina Boluarte prohibió el ingreso de Evo Morales por «intervenir» en los asuntos de política interna del país. El año pasado, el parlamento derechista declaró al inca persona non grata por promover una salida al mar de su país, a través del sur peruano. Puno, la zona aymará peruano-boliviana, se ha convertido en epicentro de las protestas y desde allí se proyecta una marcha hacia Lima. En Juliaca, ya son unos 18 los muertos por choques entre manifestantes y fuerzas del orden durante un intento de ocupación del aeropuerto local. Los bloqueos de carreteras en seis de los 24 departamentos del país, incluyendo zonas turísticas como Puno, a orillas del lago Titicaca, Cusco, Arequipa, Madre de dios, Tacna y Apurímac, persisten. Las movilizaciones nacionales acumulan unos 50 muertos en casi un mes y los reclamantes demandan el cierre del Congreso, la renuncia de Boluarte, una asamblea constituyente y nuevas elecciones.
No lejos de allí, en la Media Luna boliviana, la protesta cívica continúa en Santa Cruz, Pando, Beni y Tarija, debido a la captura y condena inicial del gobernador cruceño Luis Fernando Camacho, acusado de terrorismo y Rebelión I, tres años después que logró defenestrar a Morales, esgrimiendo una biblia y una carta de renuncia presidencial redactada por él mismo. Tuvo el apoyo militar. Como en Perú.
En Brasil, el vandalismo contra los símbolos de la democracia, rechazado por todos los gobiernos del mundo; en Venezuela, tres parlamentarias opositoras de un simbólico parlamento elegido en el 2015, acusadas de “… traición a la patria, asociación para delinquir y legitimación de capitales” y en Santiago la «incapacidad administrativa» de la comunista Irací Hassler que ha disparados los índices delictuales, sin mencionar el sur de ese país. Parecido a Nicaragua en donde las y los religiosos son reas y reos de rebeldía. En Colombia, como en Perú, solamente una fuerza pública sólida, con moral y cumpliendo con sus deberes constitucionales, nos garantizará lo básico: nuestra seguridad pública y ciudadana.
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Colombie: 10 morts dans des combats entre guérilleros
RTL Info, Luxembourg
Agence Belga, Bruxelles
12 janvier 2023
Au moins dix personnes sont mortes dans des combats opposant l'Armée de libération nationale (ELN, guévariste) aux Forces armées révolutionnaires de Colombie (FARC, marxistes) à la frontière entre le Venezuela et la Colombie, a déclaré mercredi Human Rights Watch (HRW).
"Les informations que nous avons reçues font état d'au moins dix morts dans le département d'Arauca à la suite d'affrontements entre l'ELN et les dissidents des FARC", a écrit sur Twitter Juan Pappier, chercheur au sein de l'organisation internationale. Sans préciser le nombre de morts, le bureau du médiateur colombien a signalé "la découverte de plusieurs corps d'hommes tués dans des combats" ayant eu lieu lundi et mardi dans la petite ville de Puerto Rondon, près de la frontière nord-est de la Colombie. De leur côté, les autorités gouvernementales et militaires n'ont pas réagi. Des vidéos diffusées sur les réseaux sociaux montrent des hommes camouflés se tirant dessus au milieu de la végétation. Dans cette région, les rebelles de l'ELN se livrent à des combats sanglants avec les dissidents des FARC, les deux groupes ayant rejeté l'accord de paix signé en 2016 ainsi qu'une trêve bilatérale avec l'État cette année. Le président de gauche, Gustavo Petro, avait annoncé le 31 décembre avoir conclu un cessez-le-feu de six mois avec les cinq principaux groupes armés et gangs de narcotrafiquants opérant dans le pays, dont l'ELN et les FARC qui ont rejeté cette version quelques jours plus tard et refusé la trêve. Des experts soulignent que la trêve de six mois n'éteint pas le conflit dans les régions reculées du pays, où les insurgés et narcotrafiquants s'affrontent pour étendre leur territoire et leur trafic de cocaïne.
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Colombia: Ahora las cárceles funcionarían como hoteles
IFM Noticias, Medellín
https://ifmnoticias.com/ahora-las-carceles-funcionarian-como-hoteles/
12 de enero de 2023
El ministro de Justicia, Néstor Osuna ahora salió con otra propuesta que levanta polémica, los presos podrían salir de las cárceles de día y regresar a dormir en los centros penitenciarios, sencillamente los condenados, gozarían de libertad y además tendrían un sitio seguro donde pasar la noche, como si fuera un hotel.
No es la primera vez que el jefe de la cartera de Justicia lanza propuestas inverosímiles, ya había manifestado que los ladrones por ejemplo de un celular, después de devolver el objeto hurtado, pedirían disculpas y en reparación pagarían la factura del servicio del teléfono móvil por seis meses. Hace algunos años las personas que cometían delitos eran castigadas con penas privativas de la libertad en centros carcelarios y esa era la motivación para que un delincuente tuviera el temor de realizar un acto ilícito.
Pero ahora la administración de justicia pretende premiar a los delincuentes metiéndolos en la cárcel solo de noche para que gocen de la libertad en el día. Para el ministro los presos estarían vigilados en sus sitios de trabajo, pero no explico cómo se haría, es de conocimiento público que muchos delincuentes que gozan del beneficio de casa por cárcel, se mueven libremente y hasta pasan vacaciones en sitios turísticos mientras se supone portan un brazalete electrónico de control. Definitivamente los proyectos del gobierno en materia carcelaria, dan garantía a los delincuentes, mientras que la justicia parece no importar a las víctimas que a diario ven comprometida su vida, honra y bienes.
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