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Está por todas partes: en la lluvia, en nuestra comida… ¡Incluso en la placenta humana! El plástico está envenenando la vida en la Tierra.
Pero por fin hay esperanza.
¡Por primera vez, más de 100 países están exigiendo la firma de un nuevo tratado mundial para acabar con la contaminación por plásticos! Es nuestra oportunidad de mostrar un apoyo masivo mundial al plan más ambicioso para acabar con la crisis del plástico. Suma tu nombre antes de que los gobiernos se reúnan – ¡que nuestras voces sean ensordecedoras!
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Queridos amigos y amigas:
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Hemos visto cómo estrangula la vida en las profundidades del mar y en las montañas más altas. Recientemente, impactantes estudios han hallado que la contaminación por plásticos está por doquier: en la lluvia, en nuestra comida, en el agua que tomamos… ¡Incluso en la placenta humana! Está envenenándonos a nosotros y a la vida en la Tierra.
Pero por fin tenemos una oportunidad única de cambiar esto.
Ahora mismo, Naciones Unidas está considerando adoptar un nuevo tratado mundial muy ambicioso para acabar con la contaminación por plásticos. Si los países lo aceptan, ¡tendríamos verdaderas posibilidades de limpiar nuestro planeta! Pero los grandes contaminantes ya están tratando de suavizar la propuesta.
¡Depende de todos nosotros demostrarles que el mundo entero apoya el tratado más potente posible para acabar con la crisis del plástico! Los gobiernos se reúnen en unos días – haz clic para sumar tu voz, y reenvía esto a todas las personas que puedas:
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El plástico es tóxico desde el momento en que comienza su producción. Se fabrica con los mismos combustibles fósiles sucios que están provocando la crisis climática. ¡Y no se descompone! Una botella de plástico se va rompiendo hasta generar pedacitos minúsculos y casi invisibles que viajan por el mundo a través del agua y el aire, contaminando nuestros mares, nuestros ríos, ¡e incluso nuestros cuerpos!
Hasta la lluvia está contaminada por el plástico. Científicos de EE.UU. han descubierto que la lluvia está cubriendo con mil toneladas de microplásticos al año sus parques nacionales protegidos – ¡es el equivalente a verter allí 120 millones de botellas de plástico!
Se trata de una emergencia planetaria, y necesitamos una respuesta internacional urgente y coordinada. Es por eso que más de 100 países reclaman un tratado mundial vinculante que pueda acabar con la cultura del plástico desechable y permita una transición global hacia un futuro que proteja a la gente, a la fauna y a nuestro clima.
Pero las grandes firmas petroleras y químicas, así como un grupo reducido de países liderados por Japón, están tratando de debilitar el plan. Así que debemos movilizarnos rápido y demostrar a nuestros gobiernos en la reunión clave de la ONU de este mes que la gente de todo el mundo exige el tratado más firme para acabar con la plaga del plástico:
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Ya hemos hecho esto antes. Nuestro movimiento encabezó las movilizaciones que condujeron a la firma del histórico Acuerdo por el Clima de París y, más recientemente, actuamos por todo el mundo para evitar que los países ricos sigan enviando sus desechos plásticos a países de bajos ingresos. Sabemos que este tipo de batallas pueden ser largas, y que los tratados no siempre brindan los resultados esperados lo suficientemente rápido. Pero esta es la mejor oportunidad que hemos tenido para impulsar una respuesta internacional coordinada – así que todos debemos alzar la voz ahora mismo, y seguir presionando hasta que logremos un mundo a salvo del plástico.
Con esperanza y determinación,
Spyro, Laura, Luis, Anneke, Huiting, Muriel, Stefanie y todo el equipo de Avaaz
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