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Amador y Jordi..
Amador,
no me gustan los principios zapatistas porque son muy rudimentarios. Las fibras que tejen emanan del fascismo, situación revelada a partir de comportamientos corrientes, de hechos cotidianos, de actitudes del pueblo o gestos de jefe aprehendidos en su contenido psicológico, como momentos de una conciencia alienada por la idea del mandar obedeciendo. Así, su lógica dual establece una distinción irreal entre la institución, o estructura de poder que, por su prioridad legislativa, afecta a la gente, y la gente misma, como movimiento de acción para “cambiar al mundo”. Irreal -digo-, porque esta instancia, la de cambiar al mundo, como dices, viene dada por un duelo de fuerzas que obedece a un cambio en la relación entre ambas partes y a través de leyes que hagan posible dicha relación, pero nunca es su ley lo que hace que se cumpla; cada ación tiene ciertamente una relación o signifación, pero su meta no es ésta, el fin y los medios no comprenden la signifación; una acción pone en relación dos términos, pero esta relación espacio-temporal (p.e. organizarse, oponerse, etc.) no debe ser confundida con una relación lógica. No hay nada más allá de la relación. Ésta no se deja reducir a dualidades, e inspira actos que simbolizan la ley (dar, intercambiar), interpretaciones hegemónicas, y un acompañamiento de conjuntos al estilo Jacotot: doma de emancipación exterior a sus términos.
Recuerdo que cualquier sistema, precisamente en nombre de su eficacia, terminaría con la revolución. Cuanto más eficaz sea una sociedad desde el punto de vista proletario, más ejercerá su autoridad, y terminará imponiendo su poder sobre la revolución. Y, como dijo Kant, el Estado despótico se presenta directamente en ciertas acciones, como en el caso de la organización mecánica del trabajo; pero el “molino de sangre” será la figuración indirecta en la que ese Estado se refleja. El molino de sangre, por cierto, es la mencionada simbolización de la ley. Porque ya no hay relación directa de una situación con una acción, de una acción con una situación.
Jordi,
incluso la legislación directa prefigura la acción futura. Luego la representación sustituye a la acción. Y sacrifica lo esencial de su movilidad porque la representación nace en su propia desaparición. La solución sólo puede plantearse en la capacidad del mundo originario para abrir un medio en lugar de cerrarlo. Y, desde el punto de vista del tiempo o del relieve, esta capacidad es la respiración, la alternancia de los momentos de contracción y dilatación, las alternancias del afuera y el adentro, la división de la situación principal en situaciones secundarias que son como otras tantas pequeñas labores locales dentro de la tarea global. En todos estos aspectos, la representación es una espiral de desarrollo que incluye cesuras espaciales y temporales. Y ésta es la ortodoxia representativa: la tarea global, se divide en tareas locales, sucesivas y continuas. Así, cada sistema tiene su geografía, su sociología, su psicología que depende de lo precedente y que va a suscitar la nueva imaginación, arrastrando a su vez a los comprometidos a la situación siguiente, cada vez por impregnación y explosión, hasta la explosión final (abrazar su rol social, hacerse responsables de su lugar en el mundo). El comprometido atraviesa los sistemas, todos ellos englobados en la tarea presente por doquier, escapar de lo viejo para llegar a lo nuevo. Y el englobante, la tarea, soluciona o al menos satisface al comprometido por todo lo que ha tenido que hacer aquí y allí: movilizado por fuera, ha conservado la pureza de su corazón y el porvenir de sus valores. No es que encuentre la paz. Se trata de hacer coincidir las precedentes dualidades: es el compromiso exigido por la situación global, el precio que hay que pagar.
La miseria hará crujir los Círculos.
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Al final del vídeo, Anselm Jappe, tras haber participado brevemente de la experiencia zapatista, reconoce que estos, los zapatistas, hacen un esfuerzo sincero para evitar muchas de las trampas en las que cayeron muchos de los movimientos revolucionarios del pasado. Y que, para no reemplazar cierto dogmatismo con otro dogmatismo, intentan siempre elaborar nuevas vías sin caer en un relativismo generalizado, salvaguardando los principios esenciales.Dice que realmente quieren ofrecer otra forma de vida que no se integre en la sociedad capitalista existente sino que intentan inventar nuevas formas de felicidad, de imaginario y de dar definiciones de lo que hace que la vida merezca ser vivida.
https://youtu.be/XwAXoTwYQC0
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