¡FALTAN 11 DÍAS
PARA LA PRIMAVERA!
Así lo anuncia Crónica TV en urgente placa rojo catástrofe. Pero nos asomamos a la brisa del jueves y sentimos que la estación de las flores ya llegó, aunque todavía no sea evidente el perfume de los jazmines.
Hoy es la Picada Literaria número 5 y por primera vez, desde que empezamos con esta sana costumbre, demoramos la charla previa en el patiecito descubierto en la entrada de Casa Jaché. Compartimos el tacto de ese aire nuevo, entre tibio y fresco, de la noche.
Sin movernos del patiecito le fuimos dando la bienvenida a nuestros lectores, Tomás Richards y Pablo Forcinito. El uno de morral, el otro de elegante blazer azul, nada que prefigurara el tono de sus cuentos.
Cuando llegó la hora, las voces de las presentadoras Karina y Mariana nos invitaron a sentarnos entre cervezas, vinos y picadas a la luz ámbar de la lámpara.
No fue adrede haber elegido una noche cálida para autores tan escalofriantes, pero así sucedió. Primero Forcinito se espantó con el cuento de Richards, después Richards se espantó por el cuento de Forcinito. Asistimos entre divertidos y atónitos al contrapunto entre una batalla campal en Parque Rivadavia contra una casa abandonada a los espectros más sangrientos. Perras in de nai, simios subhumanos. Un bate contra una uña de acero, filosa, muy filosa.
Llegó el entretiempo y todos salimos aliviados al patiecito, otra vez a la noche agradable. En la mesa de Eulalia los cuentos levantaron polémica. En otra, Matías Orta, un axolotl de incógnito, andaba contento como cinéfilo del Gore con motosierra nueva.
En la segunda parte, Richards nos distrajo con sonrisas sobre el “síndrome del gato volador” para después meternos en una atmósfera gris de ausencias y vacíos difíciles de llenar.
Forcinito nos invitó a un freak show made in Argentina con reminiscencias al vernáculo Hechos y Protagonistas con Anabela Ascar por Crónica TV. La tribuna en vivo promete una simpática tomatina para humillar más aún al próximo entrevistado, pero cuando uno invita al piso a un Lobizón, aunque más no sea un muchacho tímido de un pueblo perdido, conviene tomar algún recaudo.
Para el final quedaron los fotopoemas de Karina Sacerdote y Mariana Alonso. En la primera noche primaveral de Buenos Aires navegamos la fría Venecia en una góndola fantasma y le dimos la espalda al ocaso del invierno desde cualquier terraza porteña.
Tras la despedida hasta la próxima y los aplausos nos fuimos a casa con los cinco sentidos plenos. Loli y Bea no dejaron su mesa sin antes prometer su asistencia de acá hasta fin de año. Y no es para menos, ya fantaseamos con las próximas picadas a la luz de la luna en la terraza, los cuentos flotando en la suave brisa que precede al verano. Nos veremos ahí.
Ficha Técnica:
Pablo Forcinito (1978) Escribe poesía y narrativa. Poemas suyos aparecieron editados por primera vez en los ensayos de Marcelo di Marco Hacer el verso y Atreverse a escribir (Sudamericana, 1999 y 2002, respectivamente).
Junto a Emmanuel Taub, en la sección “Altovuelo”, del periódico Fin, ha publicado entrevistas a poetas argentinos.
Es miembro de La Abadía de Carfax, círculo de escritores de horror y fantasía.
Ha escrito Como si algo desde adentro empujara (novela) y Labrar la noche (poesía),
libros que permanecen inéditos.
Tomás V. Richards (1983), publicó cuentos en diversas revistas literarias y antologías. Escribe reseñas de muestras plásticas para Ramona web.
Su cuento “Ver fantasmas” ganó el primer premio en el II certamen de Revista Axolotl.
Recientemente el C.C. Rojas seleccionó un cuento suyo para integrar la Antología de Nuevos Narradores próxima a publicarse.
Karina Sacerdote leyó fotopoemas de la serie Belleza de invierno y Mariana Alonso fotopoemas de la serie Fantasmas.