El Dr. Wilson Giovanni Jiménez Barbosa aborda las tensiones entre los avances tecnológicos, específicamente la inteligencia artificial, y la implementación de políticas como la renta básica universal, el Dr. Jiménez discute cómo la Cuarta Revolución Industrial no solo reemplaza el trabajo físico con máquinas, sino también las funciones cognitivas, lo que plantea escenarios de creación autónoma por las máquinas. Reflexiona sobre las visiones utópicas como la de John Maynard Keynes, quien predijo un futuro donde las máquinas trabajarían por nosotros, reduciendo la jornada laboral y liberando a la humanidad de la necesidad económica. Sin embargo.
La importancia de la renta básica universal como un medio para liberar la creatividad y el potencial humano, más allá de la dependencia económica, permitiendo una vida plena y equilibrada. En el contexto urbano, el autor analiza la migración hacia Bogotá y sus efectos, señalando la fragmentación social y económica de la ciudad, donde la renta básica universal podría ser una herramienta para reducir las desigualdades y dar igualdad de oportunidades, alineándose con las teorías de justicia social de John Rawls y Amartya Sen.
Tengo un pregunta detonadora, Dado que la Renta Básica Universal se plantea como una medida para generar bienestar humano, ¿Cómo podríamos expandir este concepto hacia un enfoque más inclusivo que también contemple el bienestar de lo no humano, promoviendo un modelo de convivencia y sostenibilidad que trascienda el antropocentrismo?
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| Tue, Jul 19, 12:25 PM (6 days ago) | ||
Estimado Dr. Roger,
Gracias por sus reflexiones sobre este tema tan importante en mi formación doctoral. Coincido en que los conceptos que manejamos y la manera en que pensamos y diseñamos el bienestar están profundamente anclados en marcos antropocéntricos, lo cual limita la posibilidad de imaginar modelos inclusivos que trasciendan las necesidades humanas. Incluso al pensar en el bienestar de lo no humano, seguimos colocándonos en el centro. Por ello, utilizaré términos como bienestar de otras especies, bienestar de otros animales, bienestar de otras formas de existencia e incluso bienestar del planeta.
Al explorar las posibilidades de una Renta Básica Universal (RBU) y su potencial expansión hacia un enfoque más inclusivo que contemple el bienestar de otros seres, es crucial considerar las limitaciones actuales de nuestras estructuras jurídicas y éticas. Es prioritario descolonizar el derecho del centralismo humano para incluir a la naturaleza y a los animales como sujetos de derechos. En Colombia, se han dado pasos significativos, como el reconocimiento del río Atrato como sujeto de derechos y la consideración de los animales como seres sintientes, pero esto es solo un primer paso hacia un cambio profundo en cómo concebimos la justicia y el bienestar.
Sin embargo, como bien señala, existe una complejidad en trasladar nuestras "figuras de mérito" humanas hacia un contexto que tenga sentido para otras formas de existencia. El antropocentrismo moral sigue siendo un obstáculo significativo, reflejando la resistencia a considerar la igualdad moral de los animales y otros seres, y manteniendo un sesgo especista que se manifiesta tanto en las legislaciones como en las prácticas cotidianas.
Su reflexión sobre el término "revolución" también me resulta pertinente; sigue anclado en un concepto desde una perspectiva exclusivamente humana. Tal vez necesitemos un lenguaje y un paradigma distintos que reconozcan la interconexión de todos los seres y la necesidad de un modelo de coexistencia que no sea simplemente una extensión de nuestra visión del progreso, sino una reimaginación, un rediseño del mismo.
El desafío, por tanto, es doble: pensar en cómo estructurar políticas como la RBU para que no solo respondan a las necesidades humanas, sino que también consideren los intereses de otras especies, y desarrollar un marco ético que permita que estas políticas sean viables. La cuestión de cómo pensar en modelos que incluyan a otras formas de existencia sin imponerles nuestras construcciones humanas es, sin duda, un desafío. Quizás la clave esté en pasar del diseño centrado en el ser humano hacia un diseño centrado en el planeta, como proponen algunos autores.
Gracias de nuevo por inspirarnos a profundizar en estas preguntas fundamentales.
Saludos cordiales,
Libardo Arturo De la Cruz Escobar