Las principales teorías económicas explicadas con dos
vacas
Socialismo: Tú tienes 2 vacas. El Estado te obliga a darle 1 a tu vecino.
Comunismo: Tú tienes 2 vacas. El Estado te las quita y te DA algo de leche.
Fascismo: Tú tienes 2 vacas. El Estado las afilia a la Corporación Nacional de Vacas y te VENDE algo
de leche. Las ganancias las ahorra para comprar armamento.
Nazismo: Tú tienes 2 vacas. El Estado te las quita y edifica un monumento a su pérdida heroica.
Burocratismo: Tú tienes 2 vacas. El Estado te pierde una, ordeña la otra y luego tira la leche al
suelo.
Capitalismo
tradicional: Tú tienes 2 vacas. Vendes una y te compras un toro. Haces más vacas. Vendes las vacas y ganas dinero. Luego
te jubilas rico, multimillonario, pero no lo suficiente para dejar de trabajar.
Capitalismo
Moderno: Tú tienes 2 vacas. Vendes 3 de tus vacas a tu empresa que cotiza en bolsa mediante letras de crédito abiertas por tu
cuñado en el banco. Luego ejecutas un intercambio de participación de deuda con una oferta general asociada con lo que ya tienes las 4
vacas de vuelta, con exención de impuestos por 5 vacas. La leche que hacen tus 6 vacas es transferida mediante intermediario a una empresa con
sede en las Islas Caimán que vuelve a vender los derechos de las 7 vacas a tu compañía. El informe anual afirma que tu tienes 8
vacas con opción a una más. Coges tus 9 vacas y las cortas en trocitos. Luego vendes a la gente tus 10 vacas
troceadas en miles de porciones. Curiosamente, durante todo el proceso nadie parece darse cuenta que, en realidad, tú
sólo tienes 2 vacas. Como sabes que eso no durará mucho sin que se sepa, necesitas generar otro producto y sacas participaciones de
preferencia en el estiercol de las 10 vacas producido durante toda su vida y las vendes bien, cuando te inspeccionan resulta que no hay nada de
estiércol porque cortaste a las vacas en pedacitos; tú dices que quien compró lo del estiércol debería saberlo. (Se
dio el caso, alguna vez, en el que las vacas no produjeron estiércol porque murieron prematuramente por el virus H5N1; los compradores lo
sintieron mucho pero claro, más los vendedores)
Capitalismo
Neoliberal: Tú, tienes 2 vacas, te dan una muy buena producción de leche con lo que haces cálculos y te endeudas para
comprar otras 2 vacas. El gobierno reduce la cuota de producción de leche, pone precios de regulación más bajo, por lo que no
puedes pagar las deudas. El gobierno generosamente salda tus deudas a cambio de quedarse con las 4 vacas; pero como no es su tarea esto de criar
vacas, las privatiza regalándoselas a una multinacional lechera "MindCow" a cambio de que las
alimente. Un tiempo después un político de ese gobierno o su familiar entra a formar parte del equipo directivo de la multinacional.
Economía
japonesa: Tú tienes 2 vacas. Las rediseñas a escala 1:10 y que te produzcan el doble de leche. Pero no te haces rico. Luego
ruedas todo el proceso en dibujos animados. Los llamas ‘Vakimon’ e incomprensiblemente, te haces millonario.
Economía
alemana: Tú tienes 2 vacas. Mediante un proceso de reingeniería consigues que vivan 100 años, coman una vez al mes y se
ordeñen solas. Nadie cree que tenga ningún mérito. Los lacteos de estas vacas los vendes muy bien en Grecia,
Irlanda, Rumanía, Italia, España, Portugal,... pero en Francia, UK y EEUU no llegan al mercado porque los grupos activistas como los
animalistas "CowGhost" dicen que esas vacas van con mala leche.
Economía
rusa: Tú tienes 2 vacas. Cuentas y tienes 5 vacas. Vuelves a contar y te salen 257 vacas Vuelves a contar y te salen 3 vacas. Dejas de
contar vacas y abres otra botella de vodka.
Economía
china: Tú tienes 2 vacas. Tienes a 300 chinos ordeñándolas. Explicas al mundo tu increíble ratio
de productividad lechera. Disparas a un periodista que se dispone a contar la verdad. Si la gente se muriera, entonces prohibirás que en la
cadena de distribución la mezclen con agua y melamina. !Qué mas da! La leche china sólo se bebe en China.
Capitalismo
americano: Tienes dos vacas. Vendes una y fuerzas a la otra a producir la leche de cuatro vacas. Te quedas
sorprendido cuando ella muere. Te apuntas a una misión en la India para buscar terroristas y no sabemos cómo, aparecen 4 vacas
sagradas en tu granja de Oklahoma.
Economía
iraquí: Tú no tienes vacas. Nadie cree que no tengas vacas, te bombardean y te invaden el país.
Tú sigues sin tener vacas.
Economía
india: Tú tienes 2 vacas. Las pones en un altar para adorarlas. Después sigues comiendo arroz al curry. Si falta alguna es que:
!se habrá ido por ahí!
Economía
suiza: Hay 50. 000. 000. 000 de vacas. Es obvio que tienen dueño pero nadie parece saber quién es. Tampoco
pueden saber si son vacas de verdad o inventadas, lo único es que dicen que estar están.
Economía
francesa: Tú tienes 2 vacas. Entonces te declaras en huelga, organizas una revuelta violenta y cortas todas las carreteras del
país, porque tú lo que quieres son 3 vacas.
Economía
neozelandesa: Tú tienes 2 vacas. La de la izquierda te parece cada día más atractiva.
Capitalismo
italiano: Tienes dos vacas. Una de ellas es tu madre, la otra tu suegra, ¡maledetto!
Capitalismo
británico: Tienes dos vacas. Las dos están locas. No hay quién las controle.
Economía
española: Tú tienes 2 vacas, pero no tienes ni idea de donde están. Pero como ya es viernes, te bajas a desayunar al bar
que tienen el Marca. Si acaso, ya te pondrás a buscarlas el miércoles después del puente de San Aniceto. Cuando llega el
miércoles resulta que te han contado lo del neoliberalismo y que lo están poniendo en España por lo que, como tú
eres muy espabilado y las coges a la primera, en vez de las vacas te pones a buscar una multinacional lechera para que tu primo que
está en la política, es alcalde, te coloque allí al yerno.
Economía
mexicana: Tú tienes dos vacas. Una está llena de marihuana en sus ubres y su panza. La otra aparece en una narcofosa
descabezada y acribillada. El ejército resguarda el sitio del hallazgo, y deja libre a la vaca que portaba la marihuana por falta de pruebas.
Días después, esta vaca aparece muerta (sin la marihuana, desde luego) en el desierto de Arizona por cruzar ilegalmente la frontera
hacia Estados Unidos. El dinero producto de la venta de la hierba es blanqueado en bancos mexicanos, de Estados Unidos y del Caribe, y un rico
prestanombres compra un rancho mexicano con diez mil cabezas de ganado. Sin duda, ésta fue la opción más productiva.
Carlos Sánchez, plataforma por la banca
pública
