El lado «obscuro» del Pontificado de Juan Pablo II

4 views
Skip to first unread message

CENTRO ANTI-BLASFEMIA

unread,
Feb 21, 2011, 7:11:04 AM2/21/11
to LA SAGRADA BIBLIA Y LA VIDA CRISTIANA
El lado «obscuro» del Pontificado de Juan Pablo II

1978-2005: Aspectos menos conocidos en los 27 años del Pontificado de
Juan Pablo II
Autor: Lucrecia Rego de Planas | Fuente: Catholic.net


Juan Pablo II será declarado beato el próximo 1o de Mayo según anunció
el Papa el pasado mes de Enero. Ante la noticia nadie ha quedado
impávido, pero las reacciones han sido de lo más diversas dentro y
fuera de la Iglesia.

LOS «NEGOCIANTES»

Estoy hablando aquí de Imprentas, Casas Editoriales, Aerolíneas,
Agencias de viajes, Hoteles y Fabricantes de souvenirs y objetos
promocionales y religiosos.
Este grupo recibió con gran alegría la noticia de la beatificación
(aunque la mayoría no tiene idea de lo que un beato significa), por
ver en ella una grandísima oportunidad para lucrar económicamente con
la devoción de las personas: sacaron de sus bodegas los escritos ya
empolvados de Juan Pablo II, para exhibirlos de nuevo, después de
cinco años de encierro, en los escaparates de las librerías; iniciaron
la producción en serie de estampitas, medallas, imágenes, banderolas,
globos... todos con la imagen de Juan Pablo II, para tener un buen
stock a la venta en las fechas próximas a la beatificación; bloquearon
todos los vuelos a Roma y los hoteles en esa ciudad, en esas fechas,
para armar y vender “paquetes” para los peregrinos que quieran asistir
al magno evento y que puedan, claro, pagar el sobreprecio.
Está bien, a mi juicio. Todos son negocios lícitos y, si usando de
pretexto algo bueno (muy bueno) como es la beatificación de Juan Pablo
II, se crean nuevas fuentes de empleo y se genera riqueza para las
familias de los comerciantes... está bien.

LOS «ENTUSIASTAS»

La «Generación Juan Pablo II»... muchos millones de católicos que
ahora tienen entre 20 y 30 años. Nacieron y crecieron bajo su
pontificado; vieron, en todos los medios de comunicación, centenares
de fotografías y escenas del «Papa Viajero» abrazando a los niños, a
los nativos, a los indígenas, a los enfermos y ancianos. Lo vieron,
con simpatía, en fotografías esquiando en los alpes suizos, caminando
por parajes hermosos con botas y mochila al hombro, poniéndose
sombreros típicos de los lugares que visitaba. Jamás leyeron un
discurso, libro, carta o encíclica de él (eran muy pequeños para
hacerlo), pero todos gritaron con entusiasmo, en algún momento, “Juan
Pablo, segundo, te quiere todo el mundo” al verlo pasar a lo lejos en
el Papa-móvil o en algún evento multitudinario como las Jornadas
mundiales de la Juventud.

Esta generación está sensiblemente emocionada con la beatificación. Se
trata de «su Papa» al que todavía quieren, extrañan y veneran, pues,
aunque jamás leyeron nada de él, ni recuerdan una sola palabra de sus
discursos, su mera imagen les trae hermosos recuerdos de su infancia.
No se han quedado quietos con la noticia. Gran parte de ellos está ya
organizando, en todos los rincones del planeta, Homenajes, Jornadas,
Eventos, para festejar la beatificación en grande y tener, sí, de
nuevo, la oportunidad de gritar emocionados “Juan Pablo, segundo, te
quiere todo el mundo”. Ya han reservado grandes escenarios,
auditorios, estadios y cines y se encuentran elaborando vídeos, himnos
y canciones con los últimos avances tecnológicos y sofisticadas
escenografías para que en el festejo haya de todo: imágenes 3D, sonido
surround y efectos especiales que exalten el corazón de todo el que
asista.

A juicio de algunos, todo este entusiasmo juvenil, sus esfuerzos y el
dinero que se está invirtiendo en la organización de los magnos
eventos, sería mucho más fructífero para el Reino de Cristo si se
invirtiera en la evangelización y la formación de tantos católicos que
no conocen su fe. No sé... pudiera ser que tengan razón.
A mí en lo personal, más que la fiesta, me cuestiona el hecho de que,
si la beatificación autoriza sólo el culto local (y no universal, que
es permitido y obligado sólo después de la canonización), tal como lo
confirmó recientemente el Card Saravia aquí... ¿es lícito,
canónicamente hablando, organizar y promover estos festejos alrededor
de la persona de Juan Pablo II fuera del lugar en donde será la
beatificación?
Dejo la pregunta al aire, pues no conozco la respuesta.


LOS «RESENTIDOS»

Cuando mucho son una decena de personas, eso sí, muy ruidosas,
extremadamente ruidosas, que están verdaderamente furiosas con la
beatificación. En su momento le presentaron peticiones a Juan Pablo
II, éste no se las concedió y ahora, resentidos, buscan la manera de
vengarse de él tratando de difamarlo ante los medios, alegando que fue
encubridor, solapador y no sé cuántas cosas más. No hay quien los
escuche, pero seguramente seguirán gritando en los medios que se
presten a difundir su rencor.

LOS «CASTIGADOS»

Aquí hablo de esos pequeños grupúsculos que, como los anteriores,
también están resentidos en contra de Juan Pablo II porque fue él
quien los puso “en su lugar” y los amonestó, en público,
desenmascarando sus infidelidades. Acá están, entre otros, los
teólogos de la liberación, las feministas radicales, los homosexuales,
los curas casados, los promotores del sacerdocio femenino y de la
abolición del celibato. Todos estos rechazan la idea de la
beatificación, tachando a Juan Pablo II de retrógrada e intolerante.
En fin... con sus quejas, groseras e irrespetuosas, sólo están
luciendo y confirmando lo mal que están.


LOS «CRITICOS»

Personas entre 45 y 60 años, buenos católicos (muy buenos) que
vivieron la transición Pío XII - Juan XXIII - Pablo VI - Juan Pablo II
y sufrieron con los desórdenes del post-concilio. Éstos, son de los
que están acostumbrados a buscar “el puntito negro en el arroz” con
frases del tipo “Todo muy bien, pero...”
La próxima beatificación de Juan Pablo II no ha sido la excepción y
los críticos han empezado a buscar y encontrar “los negritos”.
Siguieron de cerca a Juan Pablo II, escucharon con atención sus
discursos, leyeron sus cartas y encíclicas, lo admiran, lo quieren,
saben que fue una persona excepcional, pero...
- ¿Por qué besó el Corán en 1999?
- ¿Por qué en el encuentro con la juventudes mahometanas los invitó “a
vivir su fe también en otros países”, en lugar de invitarles a
convertirse al cristianismo?
- ¿Por qué, en México, aceptó recibir una “limpia” de manos de una
bruja, durante la ceremonia de canonización de San Juan Diego?
- ¿Por qué permitió que se pusiera la imagen de un buda sobre el altar
(reservado para la Eucaristía) durante el encuentro en Asís y, en
cambio, no permitió, ahí mismo, que se entronizara la imagen de la
Virgen de Fátima “por no herir la sensibilidad de las otras
creencias”?
- ¿Por qué permitió, en África, que una mujer topless leyera las
lecturas durante la Misa?
- ¿Por qué puso una oración en el muro de los lamentos en Jerusalén,
como si fuera judío?
- ¿Por qué aumentó misterios al Rosario, siendo una oración
“intocable” dictada por la mismísima Virgen?
- ¿Por qué se rebajó a “orar” junto con brujos vudús (abiertamente
satánicos) en el encuentro de Asís?
- ¿Por qué...?

En fin... estas personas no son malas (al revés). Quieren la
beatificación de Juan Pablo II, pero... sí... expresan, un poco
consternados, que les hubiera gustado que alguien les explicara si se
revisaron, durante el proceso, estas acciones “poco ortodoxas” (a su
juicio) de Juan Pablo II.
Ignoro si la Santa Sede hará público todo el estudio previo a la
beatificación. Supongo que no. Así que estas personas se quedarán con
la duda y, estoy segura que en cuanto se declare beato a Juan Pablo
II, lo venerarán obedientemente, pues son personas fieles al Papa y al
Magisterio.

LOS «FANS DEL CARD. RATZINGER»

Éste es un grupo bastante numeroso de excelentes católicos que aman
profundamente a a la Iglesia; conocen y defienden la Tradición y la
Sagrada Liturgia y que, basándose en las palabras del entonces Card
Ratzinger en el Vía Crucis del 2005 (unos días antes de la muerte de
Juan Pablo II) se preguntan: “¿puede ser declarado beato alguien que
dejó la Iglesia en este estado tan deplorable?”

Aquí copio algunos extractos de las palabras del Cardenal (*):

"Pero, ¿no deberíamos pensar también en lo que debe sufrir Cristo en
su propia Iglesia? ¡Cuántas veces se abusa del santo sacramento de su
presencia, en qué vacío y maldad de corazón entra él con frecuencia!
¡Cuántas veces celebramos sólo nosotros sin darnos cuenta siquiera de
él! ¡Cuántas veces se deforma y se abusa de su Palabra! ¡Qué poca fe
hay en muchas teorías, cuántas palabras vacías! ¡Cuánta suciedad en la
Iglesia y también entre los que, por su sacerdocio, deberían estar
completamente entregados a él! ¡Cuánta soberbia, cuánta
autosuficiencia! ¡Qué poco respetamos el sacramento de la
reconciliación, en el cual él nos espera para levantarnos de nuestras
caídas! [...]Señor, frecuentemente tu Iglesia nos parece una barca a
punto de hundirse, que hace agua por todas partes. Y también en tu
campo vemos más cizaña que trigo. Nos abruman su atuendo y su rostro
tan sucios. Pero los ensuciamos nosotros mismos. Nosotros somos
quienes te traicionamos[...]"

Este grupo está erróneamente convencido de que Juan Pablo II se dedicó
a viajar y a establecer relaciones diplomáticas y descuidó, mientras
tanto, el interior de la Iglesia y el depósito de la fe.

La existencia de este grupo es lo que me impulsó a escribir este
artículo, pues estoy convencida de que están en el error.
Efectivamente, durante todo el pontificado de Juan Pablo II, los
medios se dedicaron a publicar sólo sus viajes apostólicos y
diplomáticos y sus hermosas fotografías con gobernantes y personas con
trajes folclóricos. Pero... hubo una parte muy importante en el
pontificado de Juan Pablo II que los medios dejaron en la más completa
obscuridad. No le hicieron la más mínima promoción, no sé si por
ignorancia u omisión voluntaria. Es el «lado obscuro» del pontificado
de Juan Pablo II, no porque sea tenebroso, sino porque se quedó en la
obscuridad de los archivos vaticanos.

Para este grupo, quise hacer una lista (de ninguna manera exhaustiva)
de algunas cosas que se hicieron durante el pontificado de Juan Pablo
II para defender la fe y disciplina dentro de la Iglesia.

Pensaba ponerla aquí mismo, pero al hacerla resultó ser una lista
demasiado larga para dejarla en el cuerpo del artículo, así que la
pongo en un artículo aparte, al que pueden acceder aquí:

1978-2005: aspectos menos conocidos en los 27 años del Pontificado de
Juan Pablo II

Confío en que, al verla, este grupo reflexionará y se dará cuenta del
gran trabajo que hizo (también hacia dentro) Juan Pablo II.

LOS QUE MEJOR SABEN DEL TEMA

Acá están, por supuesto, el Papa y todo el equipo que colaboró
directamente en el proceso de beatificación: Mons. Slawomir Oder,
postulador de la causa, abierta formalmente el 28 de junio del 2005;
los vicepostuladores, los miembros del Tribunal Rogatorial en
Cracovia, los censores teólogos (encargados de analizar todos sus
escritos), los testigos de visu y ex auditu que declararon; el
promotor de justicia (antes llamado "el abogado del diablo"); el
miembro del Colegio de Relatores que habrá presentado la ponencia a la
Comisión de teólogos y éstos, que con su voto positivo la pasaron a
los Obispos y Cardenales miembros de la Congregación para las causas
de los Santos.

Estas personas sí saben del asunto pues estudiaron a fondo (muy a
fondo) la vida y obra de Juan Pablo II y presentaron su voto a favor
para que Benedicto XVI lo declarara Venerable, junto con Pío XII, el
19 de diciembre del 2009, confirmando formal y públicamente su
vivencia heroica de las virtudes.

En este grupo también está el grupo de médicos, encabezados por el Dr.
Patrizio Polisca que llevaron a cabo, después, las investigaciones
alrededor de la veracidad del milagro presentado (la curación
inexplicable e inmediata de la monja francesa Marie Simon-Pierre,
enfermera de profesión, quien sufría la enfermedad de Parkinson) y que
es el que, al haber sido confirmado, permite que el Papa declare la
beatitud de Juan Pablo II.

Yo, junto con la grandísima mayoría de los católicos, me uno de
corazón a este grupo. Si el Papa, en su sabiduría y bondad y de
acuerdo con todos los estudios que le han presentado, ha decidido
declarar beato a Juan Pablo II, a mí no me queda duda alguna; me uno a
su alegría confiando plenamente en que todo el proceso se llevó a cabo
de manera meticulosa y exigente tal como el mismo Benedicto XVI dejó
establecido en la instrucción sobre el procedimiento en las causas de
los santos, Sanctorum Mater

No queda más que dar gracias a Dios por la beatificación próxima y por
el fecundo y prolongado pontificado de Juan Pablo II con el que Dios
ha enriquecido, bendecido y fortalecido a su Iglesia y al mundo
entero.

¡Que viva Juan Pablo II! y que Dios les llene de bendiciones a todos
ustedes.


Lucrecia Rego de Planas
Dirección
http://es.catholic.net

Comentarios al autor: lpl...@catholic.net


(*) Palabras del Card. Ratzinger en el Vía Crucis en el Coliseo el 25
de III del 2005

NOVENA ESTACIÓN
Jesús cae por tercera vez
MEDITACIÓN
¿Qué puede decirnos la tercera caída de Jesús bajo el peso de la cruz?
Quizás nos hace pensar en la caída de los hombres en general, en que
muchos se alejan de Cristo, en la tendencia a un secularismo sin Dios.
Pero, ¿no deberíamos pensar también en lo que debe sufrir Cristo en su
propia Iglesia? ¡Cuántas veces se abusa del santo sacramento de su
presencia, en qué vacío y maldad de corazón entra él con frecuencia!
¡Cuántas veces celebramos sólo nosotros sin darnos cuenta siquiera de
él! ¡Cuántas veces se deforma y se abusa de su Palabra! ¡Qué poca fe
hay en muchas teorías, cuántas palabras vacías! ¡Cuánta suciedad en la
Iglesia y también entre los que, por su sacerdocio, deberían estar
completamente entregados a él! ¡Cuánta soberbia, cuánta
autosuficiencia! ¡Qué poco respetamos el sacramento de la
reconciliación, en el cual él nos espera para levantarnos de nuestras
caídas! También esto está presente en su pasión. La traición de los
discípulos, la recepción indigna de su Cuerpo y de su Sangre es
ciertamente el mayor dolor del Redentor, el que le traspasa el
corazón. No nos queda más que gritarle desde lo más profundo del alma:
Kyrie, eleison - «Señor, sálvanos» (cf. Mt 8,25).
ORACIÓN
Señor, frecuentemente tu Iglesia nos parece una barca a punto de
hundirse, que hace agua por todas partes. Y también en tu campo vemos
más cizaña que trigo. Nos abruman su atuendo y su rostro tan sucios.
Pero los ensuciamos nosotros mismos. Nosotros somos quienes te
traicionamos, no obstante los gestos ampulosos y las palabras
altisonantes. Ten piedad de tu Iglesia: también en ella Adán, el
hombre, cae una y otra vez. Al caer, te arrastramos a tierra, y
Satanás se alegra, porque espera que ya nunca podremos levantarnos;
espera que tú, arrastrado en la caída de tu Iglesia, quedes abatido
para siempre. Pero tú te levantarás. Tú te has reincorporado, has
resucitado y puedes levantarnos. Salva y santifica a tu Iglesia.
Sálvanos y santifícanos a todos.

(**) 1978-2005: aspectos menos conocidos en los 27 años del
Pontificado de Juan Pablo II
El trabajo de Juan Pablo II
para la custodia del depósito de la fe 
y
la preservación de la disciplina eclesiástica


1979 -
Enero. Puebla. Juan Pablo II condena la «Teología de la Liberación»,
herejía de corte marxista que confunde la liberación política,
económica y social, con la salvación en Jesucristo.
Febrero. La Congregación para la Doctrina de la Fe (CDF) amonesta al
P. Bernard Häring, sacerdote redentorista, por su oposición abierta a
las enseñanzas de la Humanae Vitae.
La CDF amonesta al dominico francés Jacques Pohier y le prohíbe
presidir asambleas litúrgicas y enseñar públicamente, por su visión
ambigua y engañosa acerca de Dios y la Eucaristía.
En USA, reitera a la representante de las religiosas estadounidenses
la enseñanza de la Iglesia con respecto al sacerdocio femenino.
Octubre. Les recuerda a las religiosas, la importancia de usar de
manifestar su consagración también externamente, mediante el uso de un
hábito religioso sencillo y adecuado.
Diciembre. La CDF amonesta al teólogo holandés Edward Schillebeekx por
sus proposiciones ambiguas en materia cristológico que él se niega a
rectificar.
El 15 de diciembre, la CDF declara que "El profesor Hans Küng [suizo-
alemán] ha dañado en sus escritos, la integridad de la verdad de la fe
católica, y por lo tanto ya no puede ser considerado un teólogo
católico y no puede, como tal, llevar a cabo la tarea de enseñar. "

1980
Enero. El Papa corrige, en Holanda, algunas ambigüedades y
exageraciones del llamado “Consejo pastoral de los Países bajos” en
cuanto a la Eucaristía, la confesión, el sacerdocio, la catequesis y
el ecumenismo.
Octubre 14. La CDF re-establece, en una Carta Circular, las normas
para la dispensa del celibato sacerdotal y la reducción al estado
laical de sacerdotes que dejan el ministerio.
Noviembre 20. La CDF vuelve a amonestar al P. Edward Schillebeekx,
haciéndole ver que no ha rectificado sus ambigüedades cristológicas.

1981
Febrero 17. La CDF interviene para corregir los errores difundidos en
la “Declaración de la Conferencia de Obispos de Alemania” con respecto
a la afiliación de católicos a organizaciones masónicas y ratificando
la pena de excomunión a los mismos.
Octubre. Nombra a un delegado de su confianza para socorrer a la
Compañía de Jesús en el discernimiento y que, dejando las
desviaciones, regrese al seguimiento de su carisma original.
Noviembre. En la exhortación apostólica Familiaris Consortio, confirma
las enseñanzas de la Humanae Vitae con respecto a la inmoralidad de la
anticoncepción y ratifica que los divorciados vueltos a casar no
pueden tener acceso a la Eucaristía, a menos que decidan vivir como
hermanos.

1982
Marzo 27. La CDF interviene para corregir ambigüedades y lagunas en
materia de ecumenismo, que habían quedado plasmadas en el Informe
Final de la Conferencia Internacional Anglicana-Católica Romana
Junio 29. El Papa escribe a los obispos de Nicaragua para condenar la
llamada”Iglesia Popular”, ligada a las comunidades de base y
fuertemente impregnada por la Teología de la Liberación.
Agosto 23. Erige la Prelatura personal de la Santa Cruz y Opus Dei

1983
Enero 25. Promulga el nuevo Código de Derecho Canónico, impregnado de
una renovada misericordia disciplinaria.
Marzo. Managua. Reprueba públicamente al P. Ernesto Cardenal quien se
ha afiliado al gobierno sandinista (feroz régimen socialista). Resiste
impávido los gritos de «las madres de la revolución» durante la misa
y, valientemente, reitera su firme condena a la Iglesia popular y al
falso ecumenismo de los cristianos que se comprometen en el proceso
revolucionario.
La CDF consigue que Sor Agnes Mary Mansour abandone la congregación de
las Hermanas de la Misericordia debido a su activismo en pro del
aborto. Será el primero de una larga serie de abandonos de religiosas
atrapadas por el espíritu modernista.
Envía al Arz. de Washington, en su representación, a hacer una visita
apostólica a Mons. Raymond Hunthausen, arzobispo de Seattle, para
verificar su errónea posición ante el desarme y la evasión fiscal.

Noviembre 26. La CDF, debido a algunas interpretaciones
malintencionadas del nuevo Código de Derecho Canónico, que ya no
contiene la palabra "masonería", responde confirmando que la fe
católica y la masonería son incompatibles y que los cristianos que
pertenezcan a logias masónicas están en pecado grave y excomulgados.

1984 Pueden ver el listado completo en el artículo: Aspectos no
conocidos del Pontificado de Juan Pablo II




http://www.es.catholic.net/


Reply all
Reply to author
Forward
0 new messages