Qe8Id *Dulces mentiras - El hechizo de un beso [PDF/EPub] Book by Jill Shalvis
0 views
Skip to first unread message
love...@gmail.com
May 19, 2022, 11:04:38 AM5/19/22
to jn3ng...@googlegroups.com
5Qe8IdJ5DuX - Download and read Jill Shalvis's book Dulces mentiras - El hechizo de un beso in PDF, EPub, Mobi, Kindle online. Free book Dulces mentiras - El hechizo de un beso by Jill Shalvis.
Click to Continue
Synopsis: Dulces mentirasComo capitana de un barco de excursiones por la bahía de San Francisco, Pru era capaz de capear los peores temporales. Lo difícil era hacerlo en tierra firme. Estaba encantada con su nuevo apartamento y sus vecinos; el problema era que corría el riesgo de enamorarse de Don Perfecto Para Cualquiera Menos Para Ella.El dueño del pub O'Riley's era un tipo sexy, trabajador, de más de metro ochenta, que siempre tenía tiempo para sus amigos. Al convertirse en uno de esos amigos, Pru descubrió la increíble sensación de ser la beneficiaria de las atenciones de aquellos ojos de color verde oscuro ...Willa Davis estaba intentando poner orden entre unos cachorritos cuando Keane Winters entró en su guardería para mascotas. Necesitaba que cuidara de su gata ipso facto. Sin embargo, a Willa no le hizo ninguna gracia tener que echarle una mano a un tipo que ni siquiera se acordaba de ella....
Click to Continue
Synopsis: Dulces mentirasComo capitana de un barco de excursiones por la bahía de San Francisco, Pru era capaz de capear los peores temporales. Lo difícil era hacerlo en tierra firme. Estaba encantada con su nuevo apartamento y sus vecinos; el problema era que corría el riesgo de enamorarse de Don Perfecto Para Cualquiera Menos Para Ella.El dueño del pub O'Riley's era un tipo sexy, trabajador, de más de metro ochenta, que siempre tenía tiempo para sus amigos. Al convertirse en uno de esos amigos, Pru descubrió la increíble sensación de ser la beneficiaria de las atenciones de aquellos ojos de color verde oscuro ...Willa Davis estaba intentando poner orden entre unos cachorritos cuando Keane Winters entró en su guardería para mascotas. Necesitaba que cuidara de su gata ipso facto. Sin embargo, a Willa no le hizo ninguna gracia tener que echarle una mano a un tipo que ni siquiera se acordaba de ella....
Reply all
Reply to author
Forward
0 new messages