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[francisco fenoy rodríguez]

UN FANTASMA RECORRE EL MUNDO GLOBALIZADO

 

El fantasma de las monedas sociales paralelas. Así paulatina lentamente la sociedad se va uniendo en socavar al último largo ciclo de recesión y sin salida del modelo-social vigente.

Al carecer el modelo-social  del Valor necesario para reproducción, las mafias dominantes lo han sustituido por el papel-moneda y dando como resultado para que tenga algo de aparente valía ese papel-moneda, inflar los precios entre un 1.000 a un 10.000 % ya que dichos precios no corresponden a la productividad dada. Pero a pesar de esa artificialidad de los precios de las mercancías, no consiguen ni pueden conseguir sus objetivos de reproducción y ebrios se dedican a jugar con el papel-moneda en juegos especulativos, que tampoco traerán la reproducción por la sencilla razón que no dejan de ser juegos y la economía-política es algo más serio que juegos de cromos.

Así llevamos con este largo ciclo de recesión, sobre 40 años. Se debe a que esa mafia legalizada ha sido capaz de conseguir y de concentrar en sus manos: a los  legislativos y gobiernos, hasta castrarlos; a la prensa, hasta transformarla en cortesanos perritos falderos; a los Tribunales, hasta vaciarlos de contenido y con ello los Estados como ilegales al no representar ya a los ciudadanos; a las universidades, que le sirvan con el objeto de que no menoscaben sus teorías de pillaje y codicia y expongan como creaciones sus mecanismos financieros-grotescos. Y con este brebaje han llegado a conseguir, que su teoría exista como predominante en la sociedad, para que la sociedad no le cuestione su barbarie. Pero los resultados reales le arrebatan y le minan su teoría: 145 quiebras bancarias, 208 monedas en quiebra,72 crisis de deuda soberana; que sale a una media de cada seis semanas. Y todos esos rescate, hechos por la sociedad para salvar a esa mafia legalizada, está hundiendo a la sociedad en la penuria y seguirá creciendo porque una vez rescatada y saneada, se la vuelven a dar a los mismos que la hundieron. Con que el ciclo se repetirá y no hay salida, y repito; porque la raíz del problema está en que no hay prácticamente Valor.

Ante esos objetivos conseguidos de las mafias legalizadas y sin una teoría predominante en la sociedad para un cambio rápido del modelo-social, los ciudadanos, paulatina lentamente van llevando a cabo, a través de las monedas sociales paralelas; con la perspectiva del cambio del modelo social. Y no solo en base por su crecimiento rápido y ante todo en el primer mundo, y de lógica que sea en el primer mundo, dado que es el lugar en donde existe más tecnología desarrollada por tanto menos Valor, sino que conlleva dentro de cada zona o región, el de una economía de autosuficiencia y con ello creando la riqueza y el bienestar social en dicha zona, y por tanto al equilibrio medioambiental;  incluyendo a su vez, las relaciones sociales en su sentido comunal, al eliminar en sus medidas la inflación y deflación.

Como un fantasma va recorriendo  la moneda social paralela con su economía anti-mafia, este mundo globalizado. Desde el norte al sur de América, desde Asia, África, Japón y hasta en la vieja Europa, que posible donde más rápidamente está creciendo. En Europa, no solo existen asociaciones de ciudadanos o barrios de ciudades, sino que hay pueblos enteros con su alcaldía con la moneda social, e incluso en Grecia y en Francia con una ciudad entera con sus instituciones que usan dicha moneda. Donde espero pronto antes que tarde, que dichas ciudades, vayan edificando en sus edificios la energía solar térmica y con ello eliminar las contaminantes de las mafias, además de quitarles sus mercados de robos descarados. Y seguirán aumentado las monedas sociales paralelas, porque los ciudadanos no pueden vivir con monedas caducas, como el euro y el dólar, etc. todas las que dependen del Valor y aun menos vivir bajo la raposa de la Troica: Depredadora de seres humanos.

EL PAPEL MONEDA DIRECTAMENTE AL CIUDADANO Y A CADA UNO SEGÚN SUS NECESIDADES  O, EL CIUDADANO A LA CRACIÓN DE MONEDAS SOCIALES PARALELAS.

Francisco Fenoy.