Los árboles, las montañas, el mar, todas las formas de la naturaleza
expresan una forma de energía, aunque substancialmente sea la misma.
Ya sea una planta como una piedra, se encuentran cargadas de Ch´i o
Energía, y la interacción de estas corrientes sutiles puede ser
aprovechada si se desarrolla la sensibilidad más fina desde diferentes
ángulos; pero para ello se requiere de disciplina y de un carácter
muy particular. Llegar a comprender este patrón natural es lograr
interpretar las diferentes energías de los seres humanos y de la
naturaleza que opera en el medio circundante.
El Valor Primordial del Ch´i Kung estriba en el Arte de la Templanza,
y hasta no desarrollar esta condición no se conocerá el significado
real de la Energía. Templanza, firmeza, precisión, atención y
conciencia, son éstas las bases o Esencia del Ch´i Kung. Todo esto
deriva de la introspección y centralización de las sensaciones
psíquicas encausadas.
Extracto tomado del curso Taochi (instructorado) Lección 3b.
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