El día anterior al cumpleaños 7 de su hijo el señor Andrew encontró una nota en la mesa de noche al lado de su cama. La extendió y vio los despreocupados trazos de la letra de su hijo anunciándole que no esperaba un regalo costoso de su parte, solo que le dedicará un fin de semana.
Como Georges y su secretario ya se habían encargado de los costosos regalos no iba a poder retractarse de ese acto. Con el mismo método de escribir con su puño y letra una nota, llenó una tarjeta donde además de felicitarlo le ofrecía unas pequeñas vacaciones en Lakewood.
La fiesta fue mejor que la del año pasado, William Albert era un chico muy empatico, amable y dulce con las personas a su alrededor y los hacía sentir bien. Los invitados se divirtieron y disfrutaron de los juegos y actividades que Rosemary y William Albert inventaron haciendo de la fiesta algo único y especial.
La tan esperada visita a Lakewood llegó, Rosemary y Georges se negaron a ir con ellos para que fuera una oportunidad de fortalecer el vinculo padre-hijo. La propiedad ofrece muchas opciones para que no tengan ningún momento aburrido, desde caminar por los jardines, pasear a caballo, remar en bote hasta examinar libros en la biblioteca, jugar juegos de mesa. El señor Andrew no pierde oportunidad de llevarlo al cuarto de los retratos donde están las imágenes de sus antepasados y por supuesto un retrato de su esposa, la madre de William Albert.
También hacen planes para ir a pescar al río. El señor Andrew, que tiene mucho que no pesca, hace un intento por transmitir todo lo que aprendió años atrás de su padre. La naturaleza es generosa y en el río abundan las diferentes especies de peces, así que no se van a casa sin unas cuantas piezas.
A William Albert se le permite dormirse hasta muy tarde mientras observan las estrellas en el cielo desde el los ventanales del solario.
De vuelta a casa, retoman sus rutinas, pero de cuando en cuando hay alguna hoja de papel en la mesa de noche del señor Andrew donde William Albert ha dibujado algunos de los momentos que compartieron en esas pequeñas vacaciones.