Volver a la educación primaria intensiva y extensiva para todos los
niños.
ClaudioSerraBrun
Esta situación a la que ha llegado Argentina por la repetición nefasta
de
golpes militares (autoritarismo) y peronismo (demagogia izquierdista-
fascista) en los últimos 50 años,
ha destruído al país ejemplar que era en cuestiones de educación,
respecto a toda America Latina.
La propuesta para revertir la situación es sencilla: Volver a la
educación primaria intensiva y extensiva para todos los niños de
Buenos Aires y del país, volver al vaso de leche y el pan infaltable
en los colegios, abandonar la "cultura espectáculo" de grandes
exposiciones temáticas en grandes palacios llenos de luminarias de la
televisión y del "vanity fair" de la cultura.
La cultura no se exporta desde estos eventos, ni debe competir con la
televisión basura; se produce pura y exclusivamente en el caldo de
cultivo del debate, del diálogo permanente en programas de radio de la
Municipalidad, independientemente de la audiencia que al principio
tuvieren esos programas.
La cultura se fomenta abriendo las salas de los organismos
municipales, que permanecen vacías y cerradas toda la semana, las
aulas y espacios de los edificios públicos, que podrían albergar
debates, exposiciones y conferencias gratuitas sobre los temas
variados de la cultura, no sólo las monotemáticas exposiciones de cara
al mercadeo del arte.
Toda gestión social de la cultura que no esté supeditada a las
corrientes ideológicas ni a la audiencia, será positiva; toda
segregación y acoso a personas de otras ideas, discriminaciones por
motivos de poder, es nefasto.
Hay una "clase social" de la cultura, de los espacios cerrados de
consumo, que se aprovecha de las subvenciones y del dinero del Estado:
a estos nepotismos y mafiosos de la cosa pública hay que erradicar.
La cultura se promueve sola si se brindan los espacios en orden,
turno, temporalidad y concierto a todas las corrientes del pensamiento
y del arte, y si no se convocan ni conceden premios en metálico a
nadie, con la sola excepción de las pensiones luego de cierta edad a
los autores con premios nacionales y municipales.
La cultura está siempre viva en todos nosotros, dispuesta a florecer
cada día en el corazón y el espíritu, y es el motor de cambio, el
venero que alimenta nuestra idea y tesón en pos de un futuro mejor
para todos.
Autor: Claudio SerraBrun, Poeta argentino-español (*)
Referencias bibliográficas:
www.poesur.com