O.T. Sonrisas.. si gracias. (Pseoane y Mariví, un amor sin pedigrí )
Amelia
grupo de humor y me ha parecido que vale la pena no perderselo.
Si vuestra situación personal os lo permite, en este momento u otro, espero
que lo disfruteis.
Felicitaciones para nuestros amigos Jose y Marivi que en el relato nos hacen
sonreír y eso supongo es muy malo para la depresión, y buenísimo para todo
lo demas.
Espero que el maestro Pseoane no se me enfade pero esta medicina tan buena
así como tanto esfuerzo y talento tenia que estar presente en esta su casa.
Gracias Jose.
Abrazos y besos a repartir.
a.
P.D. Marivi estamos muy pendientes de lo que nos digas sobre la operación de
tu padre, creo que era hoy cuando le operaban, tu tranquila cielo seguro que
todo ira muy bien.
Un abrazo.
_______________
Era tan previsible como inevitable.
¿Que pueden hacer dos nicks a la deriva? ¿Dos nicks sin grupo, sin pedigrí,
sin antecedentes de haber servido en buenas casas?
Sólo pueden amarse.
Este es el caso de Mariví y Pseoane, cuya historia me propongo contaros.
He de advertiros que el delirio de su pasión llegó hasta Chinchilla, en lo
geográfico; y hasta las 6.800 palabras en lo propiamente narrativo.
Para alivio de los escasos lectores previstos, se ha dividido la amorosa
historia en un prólogo, seis capítulos y un epílogo, que se irán publicando
por entregas, si la autoridad lo permite.
Sólo quien llegue a la última línea sabrá el motivo por el que esta historia
ha sido escrita.
Es seguro que no batiré el récord de permanencia ni de simpatías en este
grupo. Pero nadie me quitará sin esfuerzo la marca de haber escrito un post
de casi 7.000 palabras.
Entre los lectores que acrediten haber leido todo el post se sortearán tres
lotes de Gelocatil, Tranxilium 10 y Seroxat 20.
Pseo (interino)
INTRODUCCION
_______________
¡Ni Romeo ni Julieta!
¡Ni Tristán ni Isolda!
¡Ni Alfredo Germont ni Violetta Valéry!
¡Ni Daóiz ni Velarde!
¡Ni Fraga ni Ribarne!
Ya nada será igual en el arte de amar.
Ninguna pareja del pasado, del presente o del futuro podrá levantar jamás
sobre la faz de la tierra una historia de amor semejante a la nuestra.
Porque, dádlo por seguro, la nuestra, la de Pseoane y Mariví, es la Historia
de Amor Más Rara Jamás Contada.
Pasarán años, decenios, centurias, siglos. Olvidará la Humanidad a Dante, a
Shakespeare, a Miguel Ángel, a Manolo el del Bombo, pero, nunca, jamás,
caerá el amor de Mariví y Pseoane al abismo del olvido.
Nada. Nada será igual. Los besos todos del mundo, serán ya reflejos de aquel
Beso. Las caricias de los enamorados serán pálida imagen de aquella Caricia.
Hasta los los trémulos suspiros de los amantes serán tan sólo ecos de aquel
Suspiro.
El amor ya tiene nombres: Mariví y Pseoane.
Y una patria: Chinchilla.
(To be continued)
Amelia
CAPÍTULO I
----------------
La muerte sabe a ajo mataero
----------------
El tren regional de Valencia a Chinchilla es de una puntualidad
sorprendente. Siempre llega veinte minutos tarde; ni uno más ni uno menos.
Es tan de fiar que hasta el encargado del tanatorio pone su reloj en hora
cuando escucha frenar a la locomotora.
La verdad es que la clientela mortuoria nunca se le ha quejado por
cuestiones horarias, pero al encargado siempre le han gustado las cosas
formales. Es un hombre serio, que se toma a pecho su trabajo. "Si aquí se
pasa la última hora en este mundo, por lo menos que sea la hora exacta",
suele pensar, mirando al reloj "Cuervo y Sobrinos" que preside la sala de
velatorios.
Además de tanatorio y estación, Chinchilla tiene dos hostales. Tiene
iglesia. Tiene un penal. Tiene un cementerio. Y tiene un hombre formal, que
todos los días ajusta las agujas de un reloj a la misma hora para que ningún
muerto llegue tarde a la última cita. Chinchilla reúne, por tanto, todas las
condiciones necesarias para ser el escenario de la Historia de Amor Más Rara
Jamás Contada.
El último viernes de enero por la tarde, el ambiente del tanatorio estaba
decaído. Apenas un par de cadáveres; pocos familiares y aún menos amigos.
Los finales de enero siempre han sido malas fechas para morirse en
Chinchilla. Hace un tiempo desapacible y el viento suele ser muy frío. No
apetece salir de casa ni muerto.
Uno de los cadáveres era el doña Encarna de Ginés y Lario, una mujer muy
mayor, soltera, que en sus años jóvenes había destacado por cierta habilidad
para hacer cestillos de esparto, y por un largo aunque confuso noviazgo con
un odontólogo de Albacete, que venía por los años sesenta a Chinchilla,
para pasar consulta una vez a la semana. Su velatorio apenas contaba con
media docena de vecinas, que rezaban, con más prisa que piedad, un rosario
por el eterno descanso de su alma.
El otro muerto estaba de paso, como si dijéramos. Había fallecido de golpe,
la noche anterior, en el restaurante El Peñón, después de haberse comido un
plato de Ajo Mataero, que es una de las más sabrosas especialidades de la
casa. Al parecer, el finado era un viajante de sanitarios residente en
Paterna. Su familia, que ya había sido avisada, llegaría en pocos minutos
a bordo del tren Valencia-Chinchilla.
Poca gente había en el andén esperando la llegada del automotor. Para ser
exacto, sólo tres personas. El más joven era un empleado de la funeraria
"Decesos La Mancha, S.L.", que, embutido en un discreto traje gris, leía las
esquelas del Diario de Albacete.
En la puerta misma de la cafetería estaba el coadjutor de la parroquia de
Santa María de El Salvador, un sacerdote aún joven, de aspecto atildado, que
se atusaba su hermoso pelo entrecano frente al cristal del escaparate.
El tercer hombre era un desconocido, ya entrado en años, de pelo
completamente blanco, recién llegado desde Madrid en coche, que paseaba
nervioso de un extremo a otro de la estación, deteniéndose a leer, de vez en
cuando, algunos párrafos del libro "Cómo evitar y controlar las crisis de
pánico", de ediciones "Auto-ayuda para todos".
Justo veinte minutos después de su hora de llegada, hizo su puntual
entrada, por el Andén Primero Vía uno, el tren regional procedente de
Valencia. Chirriaron los frenos, y aún no se había detenido totalmente la
locomotora, cuando el hombre de Madrid arrojó el libro "Cómo evitar las
crisis de pánico" a la papelera más próxima y corrió a situarse frente a la
puerta del segundo vagón, por la que ya descendía al andén una mujer de
mediana edad, pelo dorado y esbelta figura. Tenía una cara bonita y el gesto
amable, pero todo su semblante parecía reflejar una profunda tristeza.
__ Gracias por venir - dijo la mujer.
__ ¿Cómo no iba a venir? - respondió el hombre con su mejor sonrisa, al
tiempo que la abrazaba y le estampaba dos sonoros besos en las pálidas
mejillas.
Desconcertada por los besos y por el cálido abrazo del desconocido, la mujer
rompió a llorar:
__ Es... es... muy amable... muy amable... yo lamento todo esto, de verdad,
lo siento mucho... Seguramente no debía haber venido a Chinchilla. Ahora que
lo pienso, no debía haber venido. Todo esto va a ser muy desagradable.
Con la cara enrojecida por la vergüenza, el hombre dio un paso hacia atrás:
__ Bueno... yo también lo siento. No pasa nada. No te preocupes. Ya te
advertí que era feo, y mayor, tal vez tenía que haberte enviado una foto -.
Balbuceó, consternado, el hombre.
__ ¿Una foto? ¡Dios mío! ¡Qué idea! Una foto. ¿Para qué? Además, no era tan
mayor, ni tan feo. Sólo 46 años.
__ No. No. Te dije que tenía 50, no 45.
__ Perdone... pero... ¿quién es usted?- preguntó de golpe la mujer.
__ ¿Yo? ¿Quién voy a ser? Pseoane...
__ ¿Seoqué?
__ Pseoane, del grupo de humor, del de los depres...
__ Pero... ¿no es usted el delegado de "Decesos La Mancha?
__ ¿Cómo que Decesos La Mancha? ¿Cómo voy a ser yo de Decesos La Mancha? A
ver: ¿Tú no eres Mariví?
__ ¿Yo? ¡No! Yo soy Magdalena de Soria, la viuda Alfredo Soria, de
"Sanitarios Paterna". Precisamente vengo al tanatorio de aquí para recoger
el cuerpo de mi marido.
oOo
Amelia
Tribulete's News <na...@nada.com> (Pseoane)
CAPITULO II
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Los curas también suplican
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La primera en asomarse al andén para ver lo que estaba sucediendo fue
Amalia, la encargada de la cafetería. Después, salieron varios camareros y
casi todos los clientes. Finalmente, comenzó a congregarse un grupo de
viajeros que se habían cobijado del frío en la sala de espera. Temeroso de
dejar sola su mercancía de tabaco, periódicos y navajas, el hombre del
estanco estiraba el cuello de un modo casi inhumano para no perderse ni una
palabra de los acontecimientos.
Bajo el reloj de la estación, el coadjutor de la Parroquia de Nuestra
Señora del Salvador luchaba por zafarse del alegre abrazo de aquella hermosa
joven recién descendida del tren. No cabía duda de que la belleza de la
muchacha corría a la par con la desesperación del reverendo.
__ Por lo que más quiera, señorita, ¡estése quieta!, ¡Suélteme! ¡Que soy
sacerdote!- Suplicaba el coadjutor.
Pero, cuanto más braceaba el cura más se abrazaba a su cuello la joven:
__ ¡Sacerdote!... jajajajaja, ¡Ay Pseoane! Lo que eres es la hostia en
bicicleta... ¡Sacerdote! ¡Eres genial!
__ Señorita, por caridad, ¡Sosiéguese! ¡Escúcheme un momento! Se lo ruego,
por lo que más quiera... ¡que soy el coadjutor de Santa María de El
Salvador!
Pero, lejos de calmar las efusiones de la joven, cada excusa del siervo Dios
arrancaba más vivas y joviales carcajadas de ella.
__ ¡¡Coadjutor!! Ya, ya... de Coadjutores Reunidos e Hijos... ¡¡jaja
jajajajaja! - reía ella mientras le echaba los brazos al cuello y le besaba
en las mejillas - Pues ¿sabes lo que te digo? ¡Qué no eres tan feo ni tan
mayor como decías en tus mensajes!
__ ¿Pero qué mensajes, señorita, qué mensajes, de qué me está usted
hablando? - gemía agónico el clérigo
__ ¡Mira que lo haces bien! ¡Anda... que no nos vamos a divertir nada tú y
yo! ¡Qué traigo una ropa interior que ni te la imaginas! ¿Te acuerdas del
bikini? ¡Pues hoy traigo lo de dentro, y con sorpresa!
El nutrido grupo de espectadores que se había congregado en torno a la
pareja observó cómo el rostro del coadjutor iba desde el blanco nieve hasta
el rojo brillante, pasando por toda la gama cromática. Ella le estampó un
espléndido beso en la boca, y, entonces, el sacerdote se desplomó de
rodillas y comenzó a llorar con una desesperación que hubiera conmovido
incluso a la locomotora que, impertérrita, asistía al drama.
__ ¡ Por los clavos de Cristo! ¡Por la salvación de mi alma! - sollozaba el
coadjutor - ¡Por lo que usted más quiera! ¡En nombre de Dios... ¡cállese!
¡cállese!
Un gran silencio se produjo en el andén. Los espectadores, a los que se
habían sumado dos factores de Renfe, el Jefe de Estación, y media docena de
taxistas locales, enmudecieron sobrecogidos. Postrado de hinojos, el
ministro de Dios sollozaba entre dramáticas convulsiones.
__ Pero... tú... tú... ¿no eres Pseoane? - preguntó inquieta la joven.
__ ¡Pero qué Seoane! ¡Señorita! ¿De qué Seoane habla usted? - sollozó el
cura.
__ Pues, Pseoane, Pseo, el del grupo de humor...
__ Señorita - gimió el sacerdote de rodillas- yo sólo soy el Padre Benito
Soláns Fernández, coadjutor de la Parroquia de Santa María del Salvador.
No menos de un centenar de ojos se fijaron entonces en la joven.
__ Ya... joer... bueno... yo soy Mariví, encantada de conocerles a todos
ustedes.
------------------- To be continued ----------------
Pseo (interino)
Amelia
Capítulo III
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Adulterio por contrato
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El reverendo padre Benito Solán Fernández, coadjutor de la Parroquia de
Santa María de El Salvador, se sonó estrepitosamente los mocos con el
pañuelo facilitado por don Belisario Estébanez, jefe de estación de
Chinchilla.
__ Gracias, Belisario - musitó con un hilo de voz el padre Solán.
__ De nada, Padre - respondió Belisario -, pero limpiése un poco más el lado
derecho de la nariz, que le han quedado... como unos restos. Y levántese del
suelo, hombre, que ya ha pasado todo.
__ ¿Qué ya ha pasado? ¿Qué ya ha pasado? - volvió a gemir el padre Solán -
Pero... ¿qué es lo que ha pasado? ... ¿Alguién sabe lo que ha pasado?
Cincuenta cabezas se movieron de un lado a otro con gesto negativo. El
coadjutor se puso por fin en pie, ayudado por un taxista y por doña
Margarita Irazu, enfermera del ambulatorio local.
__ ¿Quiere usted un Tranxilium, padre? - ofreció doña Margarita -. Va muy
bien para estas cosas.
__ Lo único que quiero es saber que está pasando - casi vociferó el clérigo,
que junto con la verticalidad parecía haber recuperado también un cierto
dominio de la situación.
__ Ya se lo explico yo, reverendo - dijo una voz a sus espaldas.
Cincuenta cabezas de dirigieron primero hacia la voz, después hacia Mariví,
y otra vez hacia el coadjutor.
__ ¿Y usted quién es? - inquirió el Padre Solán - Si me es dada la caridad
de saber algo concreto de una vez.
__ Yo soy Pseoane.
__ Efectivamente, este señor es Pseoane - aseveró la viuda de Alfredo Soria,
de "Sanitarios Paterna".
Las cincuenta cabezas miraron primero al reverendo, después a Pseoane y,
finalmente, a doña Magdalena de Soria.
__ ¿Y usted? ¿Usted quién es? - preguntó el Jefe de Estación, sintiéndose en
la obligación de ejercer alguna autoridad en su propio andén.
__ Soy Magdalena Ortíz, viuda de Soria, el de "Sanitarios Paterna".
Cincuentas bocas pronunciaron un "¡ohhhhhhh!" de sorpresa, porque nadie
sabía que podría ser eso de "Sanitarios Paterna". Acto seguido, veinticinco
bocas se volvieron hacia las orejas más próximas y dijeron: "Es viuda".
"Es viuda", comenzó a murmurar el gentío. "Y de Soria", comentó un camarero,
"con el frío que hace allí".
__ ¡Ah! ¡Con qué es usted viuda de Soria! - preguntó el reverendo - ¡Y con
eso lo explica todo! ¿Verdad? ¡La viuda de Soria!
"Se conocen. El cura conoce a la viuda de Soria", se rumoreó entre la
multitud que ya llenaba casi todo el andén.
__ No, padre - explicó Pseoane - esta señora es viuda, pero no es de Soria.
Es de Valencia.
"¡No es de Soria! ¡No es de Soria!", cuchicheó la gente.
__ Verá, Padre: doña Magdalena es la viuda de un tal Alfredo Soria, cuyo
cuerpo se encuentra aquí, en Chinchilla.
La multitud se estremeció: "Un cadáver, han encontrado un muerto aquí, en
Chinchilla". Algunos se santiguaron, otros se echaron a llorar sin saber muy
bien el motivo.
__ Su marido murió anoche en Chinchilla - explicó apesadumbrado Pseoane - y
esta señora viene a hacerse cargo de los restos mortales de su esposo.
__ Y esta otra señorita - vociferó el padre Solán, señalando a Mariví -,
¿también viene a por unos restos mortales? ¿A por los míos, tal vez?
__ No, padre. Esta señorita se había citado conmigo aquí, en la estación de
Chinchilla - aclaró Pseoane - para pasar un fin de semana juntos y hacer...
hacer un poco de turismo. Todo ha sido una confusión. Ella le ha confundido
a usted conmigo. Nada más.
__ ¡Dios mío! ¡Díos mío! - imploró el cura - ¿qué es todo esto?
__ ¿Esto? Es una cita, padre - respondió amistosamente Mariví, creyendo que
las cosas comenzaban a normalizarse -. Un lío, en el mejor sentido de la
palabra. ¡Nada! ¡Cosas de Internet! Como él está casado, pues quedamos aquí,
en Chinchilla.
__ Pero... pero... ¡un adulterio! ... ¡en mi parroquia!
__ No, padre. No. Usted no tiene que preocuparse de nada. Esto es, cómo
decirlo, como un asueto matrimonial, una relación carnal, un bueno... ¡qué
le voy a contar a usted que usted no sepa! - intentó disculparse Pseoane.
__ ¿Y para engañar a su mujer no se le ocurre a usted mejor sitio que
Chinchilla?- rugió el padre Solán -. ¡Porque también es capricho!
__ ¡De engañar, nada! Que mi señora sabe muy bien con quién estoy y a lo que
vengo. Y tengo el permiso por escrito. Bueno. No es un permiso, exactamente;
es un contrato. Sí, un contrato. Mire: aquí tengo mi copia - dijo Pseoane
alargando un papel con tres firmas.
__ Sí, reverendo - dijo Mariví exhibiendo un contrato idéntico- yo también
tengo el mío. Mire, aquí lo dice: su señora me autoriza al uso y disfrute de
su marido
El coadjutor miró a Mariví, miró el contrato miró al cielo y preguntó a
Magarita Irazu, la del ambulatorio:
__ ¿Sigue usted teniendo el Tranxilium a mano?
__ ¿De 5 mgs o de 10 mgs?
__ Dos de diez, gracias - repondió con voz desmayada el ministro de Dios - y
tú, Amalia, ¿me sacarías un doble de cognac? Es para tragar las pastillas.
__ ¿Me haría el favor de otros dos para mí? - suplicó Pseoane - y el doble
que sea de whisqui, si no es molestia
Aprovechando el revuelo, Mariví echó una ojeada al tal Pseoane y, con ojo de
buena tasadora, lo peritó en un segundo y pensó para sus adentros: "¡Vaya,
hombre! Si que es feo el Pseo, sí; salgo perdiendo con el cambio".
oOo
Amelia
Tribulete's News <na...@nada.com> (Pseoane)
CAPITULO IV
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Después de la cuarta copa de cognac, el coadjutor don Benito Solán comenzó a
sentir un bienestar casi beatífico. Se encontraba bien, francamente bien. El
cálido ambiente de la cafetería de la estación le hacía sentirse relajado,
tranquilo, y muy comunicativo.
Incluso el recuerdo de los recientes abrazos y besos de la hermosa joven
valenciana, que con tanto denuedo había intentado rechazar momentos antes,
le producía ahora una dulce sensación de calor en la espalda y las mejillas.
__ ¡Vaya! ¡Vaya! - dijo el padre Soláns, apurando la copa y señalando el
contrato de uso y disfrute carnal de Pseoane y Mariví -. No está mal este
contrato, no señor, aunque no debiera ser yo quien lo diga. ¡Cuánto trabajo
de confesionario me ahorrarían a mí estas cosas!
__ Tiene mucha razón, Benito - corroboró Margarita Irazu, quien apeaba el
don al coadjutor como quien trata a un colega -. Si las personas
admitiéramos las cosas como son... cuánto mejor nos iría.
__ Es decir, Pseoane, que su señora admite servidumbres de paso y usufructos
distintos, solidarios e, incluso, simultáneos - dijo el coadjutor con tono
de admiración -. Lo que no permite es el cambio de dominio; la propiedad, en
una palabra.
Visiblemente afectado por los acontecimientos, y por el litro y medio de
cerveza que circulaba por su sistema circulatorio en alegre camaradería con
los Tranxiliums, Pseoane optó, como siempre, por la peor decisión. De modo,
que dijo la verdad.
__ No, padre. Es justo al contrario. ¿No ve usted que el contrato lo ha
redactado ella? A mi mujer le interesa, si acaso, el uso y disfrute. De lo
que está harta es de la propiedad. Que no sabe cómo deshacerse de mí, en una
palabra. Usted lo sabe de sobra, reverendo. Es muy difícil deshacerse de un
marido.
__ Algunos no vuelven - interrumpió Mariví-. Se van, y si te he visto no me
acuerdo.
__ Hombre, no niego que haya mujeres afortunadas - repuso Pseoane -. Pero,
en general, los maridos se van con mucha dificultad. Las mujeres, en cambio,
sí que se van.
__ Sí que se van, sí - aseguró gravemente don Belisario, con la autoridad
conferida por sus muchos años de Jefe de Estación -.
__ Con este contrato - añadió Pseoane, señalando el papel que aún estaba
sobre la mesa de la cafetería -, mi mujer me quita de en medio, y siempre le
queda la esperanza de que un día alguien rompa el contrato y no me devuelva.
__ Eso es verdad - terció Mariví, que había seguido la charla con una
atención felina -. Lo único que está penalizado en el contrato es devolverle
antes de tiempo. A mí me obliga a quedármelo hasta el domingo, que me viene
fatal, porque tengo a mi padre malo; y, encima, sin saber cómo funciona este
señor. Y si vuelvo a pasar otro fin de semana con él, me lo tengo que quedar
cinco días laborables en septiembre, que, vamos, creo yo que es un poco
abusivo.
__ ¿La primera quincena de septiembre o la segunda? - preguntó Margarita
Irazu, terminando su tercer gintonic -, porque a mí me quedará una semana
libre en el ambulatorio.
__ ¿Y usted... usted que piensa de todo esto, hijo? - preguntó el coadjutor
a Pseoane como si saliera repentínamente de un hondo sopor -.
__ ¿Yo? - se encogió de hombros Pseoane -; yo pienso, supongo, lo mismo que
usted, padre.
__ Pues, entonces, no diga nada. Nada en absoluto - ordenó el sacerdote al
tiempo de levantarse de la mesa -. ¿Qué? ¿Nos tomamos la última en la
rectoral?
__ Nosotros debíamos ir al hotel - sugirió Pseoane -, se está haciendo un
poco tarde.
__ ¡Claro! ¡Claro! - se disculpó el padre Soláns - A veces no me hago cargo
de las cosas.
En la plaza de la Estación corría un aire helado. El coadjutor se subió el
cuello del abrigo. Mariví se tapó la boca y la nariz con una bufanda. Ya la
tenía acomodada para protegerse del frío, cuando el clérigo se la retiró un
segundo de la cara y, emanando un intenso efluvio a cognac, le rozó la nariz
y los labios en lo que, tal vez, fuera un beso.
oOo
Valle
No tiene desperdicio
muacks
"Amelia" <amelia.en...@terra.es> escribió en el mensaje
news:b1b2ii$10sqo2$1...@ID-113306.news.dfncis.de...
Mariví
Quería felicitar desde aquí al maestro Pseoane y darle las gracias. Ha sido
él quien se lo ha trabajado. Mi mente no llega a tantísimo desgraciadamente.
Respecto a mi padre, no le han operado. Le han dicho que tiene demasiados
capilares y muchísima sangre en la nariz y al extirpar la verruga puede
haber una hemorragia bastante grande y prefieren ingresarlo. Total, una
horita de escaqueo en el curro y mi padre en "lista de espera" que dicen las
malas lenguas que "no existe". Tienen un morro!
Semanita de nervios para nada. Qué manera de marear.
Un beso
Mariví.
"Amelia" <amelia.en...@terra.es> escribió en el mensaje
news:b1b2ii$10sqo2$1...@ID-113306.news.dfncis.de...
Amelia
"Mariví" <yanop...@hala.com> escribió en el mensaje
news:b1bdq0$1077s0$1...@ID-151626.news.dfncis.de...
> Hola Amelia
> Hola Marivi
> Quería felicitar desde aquí al maestro Pseoane y darle las gracias. Ha
sido
> él quien se lo ha trabajado. Mi mente no llega a tantísimo
desgraciadamente.
> Pues no sabria decirte mujer.. quien sabe sabe, pero servir de inspiración
no es poco..
> Respecto a mi padre, no le han operado. Le han dicho que tiene demasiados
> capilares y muchísima sangre en la nariz y al extirpar la verruga puede
> haber una hemorragia bastante grande y prefieren ingresarlo. Total, una
> horita de escaqueo en el curro y mi padre en "lista de espera" que dicen
las
> malas lenguas que "no existe". Tienen un morro!
> Semanita de nervios para nada. Qué manera de marear.
> Bueno mujer lo que sea mejor para tu padre. Cuidate tu tambien cielo.
> Un beso
> Mariví.
> Los que quieras bonita. Y un abrazo.
a.
Amelia
de modo que lo mismo lloro que rio con sus cosas.
Beso.
"Valle" <VAL...@telefonica.net> escribió en el mensaje
news:b1b6f7$11i2mr$1...@ID-176563.news.dfncis.de...
Mariví
Pues imaginaos veros siendo un personaje de sus relatos.
Me siento orgullosa, halagada, cuidada y un montón de cosas más.
¡Admiro a este caballero!
Toy más contentaaaa!!
"Amelia" <amelia.en...@terra.es> escribió en el mensaje
news:b1bil1$10ll13$1...@ID-113306.news.dfncis.de...
Pseoane
La responsabilidad es de Amelia, que bajo su disfraz de ternura, es más mala
que todos nosotros juntos.
Para que se entienda el relato de la pasión (para mí) y calvario (para
Mariví) acaecido en Chinchilla, hay que disponer primero de una copia del
contrato de infidelidad conyugal que utiliza mi mujer para estas ocasiones,
y que os copio aquí abajo:
De una parte, Doña AMPC, en su condición de legítima esposa de don JMSC,
alias Pseoane, y de otra parte Doña ............... (aquí el nombre de la
interesada), en su propio nombre,
MANIFIESTAN
1. Que doña AMPC es la legítima esposa de don JMSC, tal y como se acredita
en anexo número 1.
2. Que Doña..........., es mayor de edad, está en perfecto uso de sus
facultades mentales, no tiene antecedentes penales, no padece enfermedad
infecto-contagiosa y actúa libremente a los efectos y naturaleza de este
contrato.
3. Que Doña........, desea mantener con don JMSC, alias Pseoane, relaciones
carnales en las condiciones que más adelante se estipulan.
CONVIENEN
1. Que doña AMPC, con el expreso consentimiento de JMSC, confiere a
doña........ .. el uso y disfrute del mismo de acuerdo con las siguientes
ESTIPULACIONES
1. Se entiende que el uso y disfrute de Pseoane durante el tiempo pactado no
genera derecho alguno sobre la propiedad conyugal del mismo, que siempre
permanecerá a favor de doña AMPC, ni sobre otras servidumbres, cargas o
derechos debidamente inscritos en los registros correspondientes.
2. Se entiende asimismo, que el uso y disfrute de Pseoane queda reducido al
ámbito de lo estrictamente privado. De modo que se prohibe expresamente
cualquier tipo de comercialización de la misma, así como la exhibición de
los interesasdos en lugares públicos.
3. Doña AMPC hace entrega de don JMSC en el estado que puede deducirse de la
observación previa por parte de la interesada. Por ello, no admite ningún
tipo de quejas ni reclamaciones sobre ningún aspecto o cuestión relacionada
con su comportamiento antes, durante, en vez de, o después de las
relaciones carnales.
La legítima esposa declina expresamente cualquier responsabilidad sobre lo
que su marido pueda hacer o no hacer bajo los efectos de las bebidas
alcohólicas, y/o el consumo de ansiolíticos o sedantes.
También declina expresamente cualquier responsabilidad acerca de los efectos
que pueda tener sobre la interesada las narraciones del citado Pseoane sobre
su madre, sobre los pantalones rojo brillante que le compró su progenitora
para ir al colegio, sobre su vida infantil o sobre la biografía política de
don Manuel Azaña.
4. Doña AMPC hace entrega de don JMSC debidamente alimentado, limpio, y
sobrio. Se le entrega con la ropa correspondiente a la estación del año, un
reloj de pulsera, unas gafas de lejos, unas gafas de cerca, prótesis
dentales superior e inferior colocadas sobre implantes, un juego de grapas
en el hígado, tensión arterial de 140-70, y con revisión médica completa de
fecha no anterior a los seis meses sobre la firma de este contrato.
Por su parte, Doña....... se compromete a la devolución de don JMSC en el
mismo estado y con los mismos accesorios.
5. Doña....... se hace cargo de la gestión, mantenimiento y administración
de don JMSC desde dos horas antes del inicio de las relaciones carnales
hasta seis horas después de las mismas. De modo que Doña......... se
responsabiliza de su seguridad y de la seguridad de las personas, bienes e
instalaciones involucradas en las relaciones.
Queda bien entendido que en caso de urgencias médicas producidas durante el
periodo de las relaciones carnales, Doña....... se hace cargo de Don JMSC
hasta su completa alta médica.
6. Las partes implicadas en la relación carnal se comprometen a hacer uso de
los debidos preservativos
7. El tiempo establecidopor las partes para cada uno de los encuentros
carnales será escrupulosamente respetado. De modo que doña AMPC no admitirá
bajo ningún concepto la devolución anticipada de su marido. En el caso de
prolongación de las relaciones, basta conque los interesados avisen
telefónicamente.
8. Doña AMPC se compromete a poner todos los medios a su alcance para que,
una vez expirada la vigencia de este contrato, don JMSC no cause molestias a
Doña............
Por su parte, Doña.......... hace declaración expresa en este acto de que su
marido, compañero, novio, acompañante habitual, familiar o cualquier otro
individuo relacionada con ella son personas pacíficas y tolerantes, de modo
que la integridad física de los firmantes de este contrato quede siempre
garantizada.
9. En el caso de que las relaciones carnales se prolongarán más allá de lo
establecido en el Anexo II de Condiciones especiales, doña AMPC tendrá el
derecho de remitir a su marido a Doña........ durante al menos cinco días
naturales y consecutivos cada dos meses, en fechas a convenir.
9. La renovación de este contrato será por meses naturales y previa
notificación formal de las partes interesadas.
Y para que surta los efectos oportunos, se firma la presente en Madrid
La propietaria, la usufructuaria, el usufructuado
"Amelia" <amelia.en...@terra.es> escribió en el mensaje
news:b1b2ii$10sqo2$1...@ID-113306.news.dfncis.de...
Amelia
CAPITULO V
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Un cena para dos
----------------
En Chinchilla, hay dos hostales propiamente dichos: El Volante y el Peñón.
Son como hermanos. Ambos están en el kilómetro 260 de la Carretera de
Circunvalación, y hasta sus números de teléfono son correlativos. El
967260058 y el 967260059.
Nadie sabrá ya porque Alfredo Soria, el viajante de "Sanitarios Paterna",
alojado ahora en el tanatorio local, prefería instalarse en El Peñón.
Probablemente porque le gustaba como preparaban allí el Ajo Mataero.
Mariví y Pseoane, desconocedores de la gastronomía local, escogieron El
Peñón porque era el que les pillaba más a mano según venían en coche desde
la Estación.
Si Pseoane fuera, como intenta aparentar, un "hombre de mundo", ya habría
reservado la mejor habitación disponible en el Hostal, dado que había
llegado a Chinchilla dos horas antes que Mariví. Pero Pseoane es cualquier
cosa, menos un hombre de mundo.
¿Cómo iba a reservar habitaciones por su cuenta? ¿Una? ¿Dos? Incluso más, no
fuera que Mariví apareciera por sopresa con amigos y familiares. Es cierto
que en el bolsillo del abrigo llevaba un ejemplar del contrato para mantener
relaciones carnales, pero... ¿y si era sólo una broma? ¿Una forma de hablar?
Así que, cuando la pareja llegó ante el mostrador de la recepción, Pseoane
optó por la menos comprometida de las opciones:
__ Buenas tardes, ¿tienen ustedes habitaciones libres? - preguntó, agotando
con ello todas sus reservas de valor e ingenio.
Para sus adentros, suplicó, rezó, imploró que no hubiera habitaciones libres
en El Peñón, ni en el Volante, ni en toda la provincia de Albacete. Por un
instante, esperó ansioso que la capacidad hotelera de Castilla-La Mancha se
hallara al ciento por cien de ocupación.
__ Sí, señor. ¿Qué necesitan ustedes? - respondió amablemente el
recepcionista.
Necesitar, lo que se dice necesitar, Pseoane necesitaba salir huyendo. Y lo
necesitaba de una forma desesperada. Así que respondió:
__ ¡Huy! Me he dejado una bolsa en el coche.
__ ¿Tu bolsa verde? - preguntó Mariví - La he bajado yo.
Perdida cualquier esperanza de salir dignamente del apuro, Pseoane se dobló
como si le hubieran disparado, y se puso a buscar algo desesperadamente en
la bolsa verde.
__ ¿Una habitación? - sugirió el recepcionista -
__ Sí, por favor - respondió Mariví.
Pseoane escuchó ese "Sí, por favor" prácticamente desde dentro de la bolsa,
en la cual ya había metido hasta la cabeza.
__ ¿Cama de matrimonio? - siguió implacable el recepcionista.
__ Sí, de matrimonio - respondió Mariví.
__ ¡Díos mío! - dijo la bolsa verde.
Cuando, por fin, Pseoane se incorporó, reapareciendo delante del mostrador,
su rostro presentaba tres zonas perfectamente delimitadas. Las mejillas
exhibían un rojo bermellón; pómulos, frente y barbilla, presentaban una
palidez mortal; y en las zonas fronterizas había aparecido un ezcema en
forma de ronchas púrpuras y blancas.
__ ¿Se encuentra usted bien? - indagó inquieto el recepcionista.
__ Sí, sí, perfectamente - gimió Pseoane -. Si acaso, tomaré algo en el bar
antes de ir a la habitación.
__ ¿Quieren que les subamos el equipaje y pasan ustedes al restaurante? - se
ofreció el recepcionista.
__ ¡Sí! ¡Muy bien! ¡Muy bien! Al restaurante, vamos al restaurante - aceptó
aliviado Pseoane que, al menos, obtenía así una moratoria de dos horas.
Pseoane tiene una enigmática fe en las moratorias. Medio siglo de
experiencia le dice que todo lo que, en ciertas cuestiones humanas, tiene
que suceder acaba sucediendo. Pero, en dos horas, pueden pasar tántas
cosas... Al fin y al cabo, en la misma mesa que ocupaban ellos ahora, don
Alfredo Soria, de "Sanitarios Paterna", había pasado a ser difunto la noche
anterior entre dos bocados de Ajo Mataero.
Mariví, por su parte, se preguntaba interiormente qué locura la había
conducido a estar sentada, un frío viernes por la noche, en el mugriento
restaurante de un perdido hostal de Chinchilla con aquel estafermo de rostro
demudado. Pero, como buena valenciana, se propuso sacar lo que buenamente
pudiera de todo aquello, así que preguntó alegremente al camarero:
__ ¿Qué nos aconseja para cenar?
__ Mire, bueno, bueno, tenemos: Gazpacho manchego, ajo mataero, perdíz en
escabeche, pisto manchego, migas, atascaburras...
__ ¿Qué es eso del Ajo Mataero? - preguntó Pseoane, más que nada por no
seguir callado tanto rato.
__ ¡Huy, señor! ¡Riquísimo! ¡Está de muerte! - respondió el camarero antes
de cambiar súbitamente de gesto y santiguarse mirando fijamente a la silla
que ocupaba Pseoane.
__ Nada de ajo, Pseo, nada de ajo - ordenó Mariví con gesto resignado.
Decididamente, toda la gracia y el encanto de Pseoane se agotaban ante la
pantalla del ordenador. En lo que no fuera escribir, nada de nada. Allí, al
otro lado del mantel, sólo había un tipo torpe, de aspecto asustado, que
apenas balbuceaba frases de dudosa coherencia.
Mariví escogió cena para ambos, poniendo especial cuidado en evitar platos
fuertes o muy condimentados.
__ ¿Beberán vino? - preguntó el camarero.
__ Sí, muchísimo - respondió Pseoane con voz lúgubre -; no se imagina
usted cuánto.
Mariví comenzó a sentir un estupor que se convirtió en auténtico miedo
cuando Pseoane rompió a hablar. Lo que unos segundos antes parecía un fardo
abandonado y silencioso, se había transformado de golpe en una expendeduría
de frases, en una incontenible catarata de palabras.
Sin mediar provocación alguna, Pseoane habló de la política agraria de la II
República en el Mediterráneo, del Consulat del Mar, de las Atarazanas, de la
crisis de los cítricos, del histórico mercado de la seda. Y se enredó en
locas historias sobre las velas latinas y de cuchillo, sobre galeones y
goletas, sobre Conrad y Michelet.
Al fín, Mariví comprendió: Pseoane intentaba agradarla hablando de Valencia,
del mar.
__ Espera, espera - dijo Mariví - tú, de pequeño, ¿no hablabas tanto,
verdad?
__ No. No hablaba casi nada - respondió él - ¿Por qué?
Fuera se había levantado una ventisca que amenazaba con arrancar hasta el
rótulo del establecimiento. Pero en el restaurante se estaba bien. Apagado
el incendio oratorio de Pseoane, la cena terminó por ser un intercambio de
infancias y de risas.
Iban ya por el tercer "JB" cuando el camarero se disculpó:
__ Lo siento, señores. Vamos a cerrar ya el restaurante. Por cierto, a su
cena para dos les ha invitado el Padre Soláns.
La moratoria había terminado. La hora de la verdad era llegada. En un último
y desesperado intento, Pseoane señaló por la ventana la carretera de
Circunvalación, helada, azotada por viento y la lluvia, y propuso:
__ Aún podemos dar un paseo. Hace una noche muy buena.
Pero ella, con el más suave de los gestos, le cogió la mano. Se la besó y
dijo:
__ En la habitación también podemos hablar.
-------------------------- CONTINUARÁ----------------- NO SE PIERDAN LA
PRÓXIMA ENTREGA--------------- MARIVI Y PSEOANE EN LA
CAMA------------------------
Amelia
aquello de tanto reirse.
Gracias querido Sulle por esas sonrisas madre de la risa que tanto valor
tienen en momentos tan graves como corren. También a ti Marivi por que te lo
mereces cielo.
Ciertamente faltaba que los compañeros supieran del famoso contrato. Mejor
que mi marido no se entere de su existencia no sea que los utilice para
facturarme a la menor de cambio, ejem ejem.
Sois muy queridos.
V.a.
"Pseoane" <na...@nada.com> escribió en el mensaje
news:b1bkqt$11ci97$1...@ID-151147.news.dfncis.de...
FJTL
Un abrazo y, pronto, espero, algo más.
Francisco José.
PD: Si, ya sé: soy un oportunista, pero las buenas ideas deben ser copiadas. ¿O no?.
--
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Norton Antivirus 2003.
"Pseoane" <na...@nada.com> escribió en el mensaje news:b1bkqt$11ci97$1...@ID-151147.news.dfncis.de...
Pseoane
Ella, en cambio, hace lo que le da la real gana. Si es usted algo robusto,
tirando incluso a gordito, tiene sentido del humor, sabe bailar, no es
arrogante y no habla sobre "cosas de hombres" tiene usted el 75% de
probabilidades de alcanzar sus objetivos. Eso sí, lo que pueda decir su
señora.... eso es asunto suyo (y de su señora de usted).
Después de aguantar a este estafermo por marido durante tantos años, lo
menos que se ha ganado mi mujer es trajinarse unas cuántas alegrías para el
cuerpo, que bien se las merece.
Aclaración 1: saber bailar no significa ser Fred Astaire. Es que yo no bailo
ni gregoriano, y a ella le encanta lo del baile agarrao.
Aclaración 2: Hablar sobre cosas de hombres es sinónimo de ponerse espeso y
trascendente. En cuanto alguien se pone espeso y trascendente, mi señora se
va a la cama (con otro, claro).
Aclaración 3: Tener sentido del humor no es ser Groucho Marx. Basta con
tener manga ancha para reirse de uno mismo. (Por ejemplo, a su juicio, yo
tengo sentido del humor. Y es, prácticamente, el único requisito que
cumplo).
Para mayor información, le facilitaré su correo electrónico.
;-))
Abrazos
"FJTL" <fjteij...@terra.es> escribió en el mensaje
news:b1bo3r$11me7q$1...@ID-108686.news.dfncis.de...
maldecido
Ardo en deseos de saber qué ocurre arriba, no sé por qué, las habitaciones me las
figuro arriba.
Mnews:b1blj2$116o2o$1...@ID-113306.news.dfncis.de...
Valle
El problema es que a mí no puede darme en usufructo nadie..
¡¡una pena!!
Besos
"FJTL" <fjteij...@terra.es> escribió en el mensaje
news:b1bo3r$11me7q$1...@ID-108686.news.dfncis.de...
Valle
¿para cuándo el siguiente?
Si, a las habitaciones siempre se sube ¿o no?
"maldecido" <mald...@wanadoo.es> escribió en el mensaje
news:b1c2a0$117ogf$1...@ID-170850.news.dfncis.de...
Amelia
se
> ofreció el recepcionista.
jajajajajaja
Será por las pelis del oeste que veía de joven pero a mi me ocurre lo mismo.
a.
"maldecido" <mald...@wanadoo.es> escribió en el mensaje
news:b1c2a0$117ogf$1...@ID-170850.news.dfncis.de...
Amelia
CAPITULO VI
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¡Viva la República!
-------------------
No es que la habitación fuera pequeña. Es que la cama parecía muy grande. A
Pseoane, al menos, le pareció una cama enorme, amedrentadora, desmedida. Dos
mesillas, un bargueño, una mesa, dos sillones, un televisor, y un armario
empotrado completaban el decorado de la escena. Sobre la cabecera de la
cama, un inmenso cuadro con la Plaza Mayor de Chinchilla al atardecer. En la
pared lateral, encima de la mesa de escritorio, un espejo con marcos
dorados.
Nada más entrar, Mariví dejó las llaves de la habitación sobre la mesa,
arrojó la bolsa de viaje sobre la cama, y se sentó en uno de los dos
sillones.
Pseoane, en cambio, se aventuró en la habitación con la cautela de quien
avanza por terremo enemigo. Primero dejó la enorme bolsa verde en el suelo,
a los pies de la cama. Pero enseguida cambió de idea, y trasladó la bolsa al
lado del bargueño. Finalmente, optó por dejarla debajo de la mesa de
escritorio.
Después, se quedó de pie, inmóvil, con un rictus parecido a una sonrisa, en
un punto equidistante de cualquier objeto material, y lo más lejos de Mariví
que las dimensiones de la habitación permitían.
__ ¿Siempre eres tan... desenvuelto? - ironizó suavemente Mariví.
__ No. No, qué va - respondió Pseoane -. De joven era mucho más tímido.
Ahora ya he ido perdiendo el miedo.
Mariví se levantó del sillón y se dirigió hacia Pseoane. Él retrocedió
aceleradamente hasta el balcón.
__ Es bonito. ¿Verdad? - dijo Pseoane, señalando los cristales.
__ No lo sé. Como están los cristales empañados, no se vé nada - repuso
Mariví.
__ Sí. Pero es bonito. ¿No? - insistió él -. Los cristales empañados, digo.
Luego, tras meditarlo unos segundos, añadió:
__ Hostal El Peñón. Viernes por la noche. En Chinchilla. En enero. A varios
grados bajo cero. Con una chica de Valencia, conocida por Internet,
invitados a cenar por un sacerdote... es raro, ¿verdad?
__ Que más da. Se está bien.
Mariví le enlazó por la cintura, apoyó la cabeza en su hombro y se puso a
dibujar emoticones con el dedo sobre los cristales empañados.
Tras ciertas vacilaciones, Pseoane echó un brazo sobre el hombro de Mariví
y la atrajo hacia él con el mismo cuidado de quien teme romper una
cristalería. Es más: en un alarde de valor, rozó incluso el pelo de ella con
los labios.
Enlazados frente al balcón, pasaron algunos minutos. Después, más minutos.
Y, finalmente, algunos minutos más. A Pseoane le dolía el brazo de un modo
casi insoportable. Mariví tenía el hombro completamente insensible, se le
estaba durmiendo la pierna izquierda y el cuello amenazaba con quedarse
doblado para toda la vida.
__ ¿Y si nos fuéramos a dormir? - preguntó Mariví, escogiendo bien las
palabras, al tiempo que se frotaba con energía la pierna y hacía
estiramientos de nuca.
__ Claro, claro, dormir, sí, dormir, es lo suyo, claro, es lo suyo, en estos
casos - respondió Pseoane.
__ ¿Sabes? Te he traído una sorpresa - río Mariví -. Déjame ir al cuarto de
baño y te la enseño.
Los minutos se le hicieron eternos a Pseoane. El corazón desbocado, la boca
seca, la carne de gallina. Cogió la jarra del agua y se sirvió un vaso.
Estaba dando el primer sorbo cuando se abrió la puerta del baño y apareció
Mariví.
Lo primero que percibió Pseoane fue el frío del agua resbalando por su
cuello rumbo al pecho. Inmediatamente después, sintió el agudo dolor del pie
sobre el que se acaba de estrellar la jarra. Pero lo peor era la
imposibilidad de cerrar los párpados. Se le habían quedado los ojos tan
abiertos como si hubiera visto venir un leopardo de Bengala.
En la puerta del baño, perfilada entre dos luces, estaba Mariví vestida de
fallera. Para ser más precisos, estaba Mariví desvestida de fallera, porque
del traje tradicional sólo llevaba los accesorios: peineta, horquillas y
otros avalorios. El resto del cuerpo apenas se escondía bajo un tul
transparente con los colores de la bandera autonómica valenciana.
Las dos obsesiones de Pseoane en aquel momento fueron, por este orden, no
perder el conocimiento, y no perder la razón. Lo primero lo consiguió
respirando profunda y lentamente, y sosteniéndose sobre la mesa de
escritorio. Para lo segundo era preciso hacer un rápido balance de la
situación.
Un primer reconocimiento no dejaba lugar a dudas. Allí estaba Mariví.
Completa, al parecer. Tenía ojos (2), hombros (2), brazos (2), manos (2),
pechos (2), caderas (2), glúteos (2) muslos (2), piernas (2) y pies (2).
También tenía nariz (1), boca (1), ombligo (1), pubis (1). Y, presidiéndolo
todo, tenía una sonrisa irresistible, inmisericorde.
Con todo, lo peor no era la anterior enumeración de realidades corporales.
Lo peor era la armonía con que tales formas se relacionaban entre sí,
materializándose en una única y sugerente figura (89, 60, 92, con el prefijo
172, también en cms.) que caminaba por la habitación, se reía y ayudaba al
estupefacto Pseoane a quitarse la camisa, los pantalones y los calcetines,
todos empapados de agua.
Ni bajo la más cruel de las torturas hubiera podido recordar Pseoane cómo y
en qué circunstancias llegó hasta la cama junto con Mariví y sus accesorios.
Toda su conciencia se diluía en una confusa bruma.
Lo único cierto es que estaba allí, entre las dos sábanas, recostado sobre
su lado izquierdo y mirando la cara de Mariví.
__ ¿En qué piensas? - susurró ella.
__ ¿Ahora mismo? - preguntó él.
__ Sí, ahora.
__ Pues pensaba en Manuel Azaña.
__ ¿En Azaña? ¿Estás pensando en Azaña? ¿Ahora? - inquirió ella
incorporándose sobre la almohada.
__ Sí... es que dió un mítin muy bueno en tu ciudad, en Valencia. Fue
extraordinario. Un 26 de mayo, en 1935. Estaba el viejo Mestalla a reventar
de gente, más de cien mil personas. Y Azaña empezó diciéndoles: "Ciudadanos:
Váis a oir unas palabras de inspiración republicana.
__ Espera un momento, corazón - dijo Mariví poniéndole un dedo sobre la
boca -. ¿Te sabes de memoria el discurso de Azaña?
__ Casi todo, ¿por qué?
__ Por simple curiosidad - aclaró ella.
Y, cuando Pseoane iba a responder, Mariví le cerró la boca con un beso
total, absoluto. Uno de esos besos que son como el órgano de las catedrales,
que estremecen hasta el último rincón de la iglesia. O como la campana de la
parroquia de Chinchilla, que, en esos mismos momentos, hacia llegar los
cuartos para las dos a todos los confines del municipio.
<na...@nada.com>Pseoane <na...@nada.com>Pseoane
<na...@nada.com>Pseoane<na...@nada.com>
Amelia
EPÍLOGO
Realmente, lo que terminó de despertar a Pseoane fue un agudo pinchazo en la
ingle derecha. Probó a mover la pierna y el dolor se agudizó. Sintió como si
tuviera un anzuelo clavado en tan delicada parte. Con todo cuidado, para no
despertar a Mariví, Pseoane deslizó la mano libre hasta la ingle, y se hizo
con la metálica causa de sus molestias. Era una horquilla.
Amablemente dada a sus brazos, Mariví seguía durmiendo. Pseoane dejó la
horquilla sobre la mesilla de noche, y, apartando un mechón de pelo que caía
sobre los ojos de la mujer, volvió a besarla. Luego, la miró largamente,
como había hecho, horas antes, a la luz del alba. Al fin y al cabo, eso era
todo: Una cabeza anidando en su hombro, la sonrisa dormida, y la milagrosa
desnudez de los cuerpos.
__ Mariví: que son las once - advirtió él, agitándole el pelo.
__ ¡Joer! ¿Ya?
__ Ya. Sólo tenemos una hora para que pase tu tren.
Carreras, duchas, encontronazos en el cuarto de baño, algún beso, muchas
risas.
__ Tengo que cortarme el pelo - dijo Pseoane, observando sus blancas greñas
en el espejo.
__ Ya te he cortado yo un buen mechón mientras dormías - rió Mariví.
__ ¿Y para qué quieres semejante reliquia?
__ Para mezclarla con hierba y cultivarla en casa. Seguro que con esos
porros me puedo morir de risa.
Cuando iban en el coche rumbo a la estación, Pseoane dijo:
__ Me apetece regalarte algo. Pero algo que te haga ilusión.
__ ¿Sabes lo que me haría ilusión? Que escribieras sobre este encuentro en
el grupo.
__ Ni hablar. Estas cosas se hacen, pero no se cuentan -se negó en redondo
Pseoane.
__ ¡Por favor! ¡Nunca he sido protagonista de nada! Cuéntalo cómo quieras,
cómo te dé la gana. Me da igual. Además, nadie se lo va a creer. ¿Quién se
va a tomar en serio que tú y yo estamos aquí ahora mismo?
Era, sin duda, un argumento de peso.
__ Si tú eres la protagonista, yo seré el que está al lado de la
protagonista - dijo Pseoane.
__ ¡Claro! - respondió Mariví -
__ ¿Te comprometes a no decir jamás lo que es verdad y lo que es mentira
sobre lo que yo escriba? - preguntó Pseoane
__ Te lo juro.
__ Entonces, será un placer escribirlo.
En el andén de la estación hacía un frío de mil demonios.
__ ¿Qué piensas ahora? - preguntó Mariví -, ¡y no me digas que estás
pensando en Azaña!
__ No - rió Pseoane, jugueteando con la horquilla en el bolsillo del
pantalón - Pensaba en que tal vez sea verdad eso de que no hay recuerdo más
amargo que el de una tentación vencida.
El tren salió a su hora. Cuando Pseoane volvía a recorrer el pueblo con el
coche, buscando la salida hacia Madrid, pensó: "Si esto fuera un relato
profesional, ahora comenzaría a llover, y yo me cruzaría con el cortejo
fúnebre del finado Alfredo Soria camino de Valencia".
Pero, la verdad es que el sol comenzaba a calentar y el único coche con el
que se cruzó al salir de Chinchilla fue un camión de Embutidos Campofrío.
---------------------------------------- SE
ACABÓ----------------------------------
Oiga... ¿se puede dedicar?
Pues entonces, para Alicia, para Valle, para Mariví, para toda la buena
gente que, como ellas, han puesto nombre a los sentimientos, y han dejado
que, alguna vez, nos viéramos en su mirada.
Pseoane
maldecido
un bargueño?? qué es un bargueño?? ¿No sería un braguero, previendo la horquilla de
Mariví clavada en su ingle?
M
"Amelia" <amelia.en...@terra.es> escribió en el mensaje
news:b1ckh7$11pghq$1...@ID-113306.news.dfncis.de...
Pseoane
Tiene pretendientes hasta con seis meses en la lista de espera y, encima, se
queja.
Las hay insaciables.
Pseoane
"Valle" <valle_...@hotmail.com> escribió en el mensaje
news:b1c3re$11tqge$1...@ID-176563.news.dfncis.de...
Amelia
hombre ni la mujer, tendríamos que tener distintas parejas para según la
ocasión o necesidad.
¡Toma castaña, ya tenéis algo en que pensar un rato!
a.
"Pseoane" <na...@nada.com> escribió en el mensaje
news:b1dfso$11dh6f$1...@ID-151147.news.dfncis.de...
Pseoane
Mueble de madera con muchos cajones pequeños y gavetas. Son aparatosos,
porque suelen tener incrustaciones y tallas. Creo que se llaman bargueños
porque, al principio, los hacía en Bargas, que es un pueblo de Toledo.
Ahora que me doy cuenta, un bargueño será también un señor de Bargas.
Me alegro de que te haya divertido. No me atrevo a escribir barbaridades así
en este grupo por si acaso molestan. A mí me distrae, me limpia la cabeza de
neuras y me río yo solo como un memo.
Un abrazo
jose
"maldecido" <mald...@wanadoo.es> escribió en el mensaje
news:b1crqa$117koq$1...@ID-170850.news.dfncis.de...
Alicia
Ya era hora de que alguien tuviera un detalle conmigo. Aquí todo se lo dice
el narciso de mi marido que es tan vago que ni para ligar quiere salir de
casa. A el que se lo den todo hecho que con escribir ya le basta.
Si te digo la verdad, mientras está con el ordenador no hace nada peor, como
ponerse a cambiar muebles de sitio, arrepentirse a la mitad y dejarnos a
todos con el sofa en el pasillo y la casa patas arriba. Como el señorito se
"deprime", pues no se le puede decir nada. Eso por no contarte otras
"habilidades" del niño.
No se como se llamara su enfermedad pero es muy rara. Cuando era niño
hablaba como si tuviera cincuenta años. De joven además de ser un tragico,
parecia que tenia 70 años. A los 35 o 40 empezo con la adolescencia. Ahora
con 50 está en plena niñez. Menos mal que Carmen (Valle) ayuda y entre las
dos resulta menos pesado. Parece que a ella la obedece un poco mas.
No sabes lo que te agradezco la oferta. Ando con los animos bajos por cosas
de trabajo, asi que estas cosas alegran mucho. Lo que no sé son los animos
que me quedan. Estoy cansada hasta para "eso", que nunca me habia pasado.
Te dejo que ya esta el pelma aquí atrás para que le deje el ordenador. (por
lo menos me da los mensajes que me llegan. Algo es algo).
Un beso.
Alicia
PD: Amelia, muchos besos. A ver si nos vemos. No solo vamos a vernos cuando
operan al "niño". Por cierto, tienes toda la razón en eso de que hace falta
una pareja para cada cosa. Lo malo es que si aguantar a uno es duro, imagina
lo otro.
"FJTL" <fjteij...@terra.es> escribió en el mensaje
news:b1bo3r$11me7q$1...@ID-108686.news.dfncis.de...
Amelia
> operan al "niño". Por cierto, tienes toda la razón en eso de que hace
falta
> una pareja para cada cosa. Lo malo es que si aguantar a uno es duro,
imagina
> lo otro.
jajajajajajajaja Si, mejor no. Pobrecito..
Hola preciosa, no me lo puedo creer. Cuanto me alegro de verte por aquí. Ya
se puede dar quien yo me se con un canto en los dientes. Alicia es la
persona más guapa por dentro y fuera de este lado del Pekos y parte de los
extranjeros lejanos.
Por supuesto estoy contigo (hombres..) pero no me pidas tanta imaginación
que se me funden los plomos. Si es que son como niños que le vamos hacer
;-))
+ Y + B de V a.
"Alicia" <nolo...@com.com> escribió en el mensaje
news:b1eufv$124pqo$1...@ID-151147.news.dfncis.de...
Pseoane
> se puede dar quien yo me se con un canto en los dientes.
Sí, hombre, con lo que me han costado los implantes. ¡Pa darme con un canto
en los dientes!
s.
"Amelia" <amelia.en...@terra.es> escribió en el mensaje
news:b1f207$12s95v$1...@ID-113306.news.dfncis.de...
FJTL
Pues lo dicho. Que cuando quieras aquí estoy para servirte. Como diría mi padre (y Jose): me pongo a tus pies (y añado yo: pero deseando ascender cuando antes).
¡Hala! Ya puedes sacar a Jose a dar un paseo, que ya le toca. Y ánimo, que ya sé que estuviste en horas bajas.
Un beso.
Francisco José.
--
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"Alicia" <nolo...@com.com> escribió en el mensaje news:b1eufv$124pqo$1...@ID-151147.news.dfncis.de...
Amelia
> en los dientes!
>
"Pseoane" <na...@nada.com> escribió en el mensaje
news:b1f336$12cbve$1...@ID-151147.news.dfncis.de...
Tania
Ha sido una grata sorpresa encontrarte por aquí.
En cuanto lo de la enfermedad que mencionas, no es nada rara, no, es de lo
más común...entre los hombres ¡claro! Ya lo decía mi abuela ¡son como niños!
Pero algunos tienen un" no sé qué" y "un qué sé yo" que se hacen querer.
En fin, un beso y espero verte por aquí más a menudo.
Tania :-*
"Alicia" <nolo...@com.com> escribió en el mensaje
news:b1eufv$124pqo$1...@ID-151147.news.dfncis.de...
Mariví
Cuánto me alegra leerte!!! No creí que eras tú. Pensé que era el gamberro de
tu marido.
Oye, que si me envías a tu legítimo, te ruego que adjuntes un manual de
instrucciones. No es justo repartirlo por SEUR geográficamente hablando a
portes pagados, no dar pistas sobre su funcionamiento y luego no admitir
reclamaciones. ;-))
Bueno, ahora en serio, encantada de conocerte, o mejor dicho, leerte. Sé que
eres un encanto de persona (me lo han dicho varios pajaritos...) y espero
que esos ánimos suban de una vez por todas.
Un fuerte abrazo
Mariví :-***
Atención: Me voy a por el café...y a por la fregona (aquí le llamamos mocho,
y el verbo es mochear)
"Alicia" <nolo...@com.com> escribió en el mensaje
news:b1eufv$124pqo$1...@ID-151147.news.dfncis.de...
maldecido
las que nos recreas!! ¿Quién podría quedar ofendido ante escrito de tan buen gusto,
no exento, así y todo, de cierta carga erótica? ¡¡ Venga, a por la segunda parte,
que a la protagonista le va!!
Salu2
M
"Pseoane" <na...@nada.com> escribió en el mensaje
news:b1et2j$12oi8l$1...@ID-151147.news.dfncis.de...
Mariví
Soy co-protagonista y estoy encantada. Dentro de un rato me voy para el
curro que tengo guardia y como estaré solita, reeleré la historía otras
tropecientas veces más. Intentaré conectarme a Internete y visitar esta web:
http://www.chinchillademontearagon.com
Jejejejejeje ;-) pa recordar....
"maldecido" <mald...@wanadoo.es> escribió en el mensaje
news:b1fov9$12i1ov$1...@ID-170850.news.dfncis.de...
Nennito
> ¡¡Joer, si las barbaridades de antavian fuesen como esta tuya y otras
similares con
> las que nos recreas!! ¿Quién podría quedar ofendido ante escrito de tan
buen gusto,
> no exento, así y todo, de cierta carga erótica? ¡¡ Venga, a por la segunda
parte,
> que a la protagonista le va!!
Pues personalmente, ni que decir tiene que prefiero "las barbaridades" de
antavian, "barbaridades" que algunas de ellas tienen "escondidas" verdades
realistas como puños, y que son "barbaridades" que a algunas personas nos
ayudan a despertar la mente.
En cuanto al hilo este, me adstengo de opinar, por no lebantar una gran
polémica, aunque creo que los que me conoceis, os imaginareis mi posición al
respecto. Pero claro, de un subnormal y un amargado de la vida como yo, que
se va a esperar:-(((
Saludos:
Nen...@UNTARANTANTANya.com
--
Encuéntrate y sé tú mismo
recuerda que no hay nadie como tú.
(Dale Carnegie)
ibn
un abrazo
juan
n article <b1gd1c$8bm$1...@nsnmpen2-gest.nuria.telefonica-data.net>,
Nen...@UNTARANTANTANya.com says...
Nennito
> tendríamos que tener distintas parejas para según la
> ocasión o necesidad.
> ¡Toma castaña, ya tenéis algo en que pensar un rato!
No es lo ideal tener distintas parejas Amelia, lo ideal, es una sóla pareja,
que sea totalmente compatible con la persona, eso es lo que busco yo, pero
como es algo extremadamente dificil de encontrar, me quedaré sólo:-( pero
prefiero eso a convivir con alguien que no esté completamente "en sintonía"
conmigo.
Un Abrazo:
ibn
Totalmenete de acuerdo Nennito pero como cada vez hay más gilipollas,
que no subnormales, pues lo de sintonizar creo que habrá que conformarse
con la radio.
Juan
In article <b1gdd5$afu$1...@nsnmpen2-gest.nuria.telefonica-data.net>,
Nen...@UNTARANTANTANya.com says...
Pseoane
como tu depresión. Si lo has leido es porque has querido, porque Amelia lo
ha señalado perfectamente.
Yo no lo he escrito para este grupo, ni lo he publicado aquí. Pero si Amelia
ha querido traerlo, es asunto suyo y muy legítimo, porque, insisto, ha
marcado el OT con toda claridad.
En otro sentido, el relato que aquí ha traido Amelia es, modestia aparte,
una perfecta, aunque humorística, descripción de lo que es psicológicamente
una "estrategia de evitación", asunto directísimamente relacionado con las
neurosis y las depresiones. Si te lo lees, y parece que lo has leido, verás
cómo se describen las maniobras de un neurótico aterrado por la
representación del objeto temido.
Y verás también, como resuelve la otra persona el conflicto, por ejemplo, en
el capítulo de la cena, escamoteando la representación del objeto temido
cuando acaba diciendo: "En la habitación también podemos hablar". Es decir:
"Puedes seguir huyendo, hablando, en la habitación porque yo no te voy a
exigir que hagas el amor conmigo".
Es decir: ni es OFF TOPIC, y, aunque lo fuera, estaba marcado como tal.
Y perdona el tono, pero este sábado tengo un humor de perros por cosas
privadas, y muerdo a la mínima.
Un abrazo, Jose
S-
"Nennito" <Nen...@UNTARANTANTANya.com> escribió en el mensaje
news:b1gd1c$8bm$1...@nsnmpen2-gest.nuria.telefonica-data.net...
ibn
Un gran relato. Me gustó leerlo.
Juan
In article <b1gf1g$12tjtm$1...@ID-151147.news.dfncis.de>, na...@nada.com
says...
Amelia
distintas ante una misma cosa, nada más.
Cada cual se consuela como puede, y así debe ser. Tan legitima e inteligente
pudiera ser tu actitud como la de Pseoane u otras, solo que hay maneras de
llevar la vida y sus pesares que son muy de agradecer para la mayoría no
masoca, y encima se pasa mucho mejor y eso es muy bueno para el hígado sobre
todo cuando no se privas del "pribe" por
que este priba.
Que si, que cada uno es cada uno, y ya esta. Lo bueno es que se pueda
coexistir los unos con los otros seamos como seamos. También nos enriquece y
nos hace crecer.
Tampoco quiero polémicas, solo es mi humilde opinión.
Un beso.
a.
"Nennito" <Nen...@UNTARANTANTANya.com> escribió en el mensaje
news:b1gd1c$8bm$1...@nsnmpen2-gest.nuria.telefonica-data.net...
Pseoane
es buena cosa que haya divergencias en las parejas, porque eso obliga al
diálogo, al pacto, al acuerdo. Ayuda a salir de un mismo.
Si sólo te gusta alguien igual tú... ¿para que te hace falta? Ya te tienes a
tí mismo. Y yo, conmigo mismo no me apaño en cuestión amorosa. (Me pasa como
a tí, que no me quiero nada. Menos mal que me enamoro de gente que es
distinta y me quiere algo).
Abrazos
jose
"Nennito" <Nen...@UNTARANTANTANya.com> escribió en el mensaje
news:b1gdd5$afu$1...@nsnmpen2-gest.nuria.telefonica-data.net...
Amelia
que sea totalmente compatible con la persona, eso es lo que busco yo, pero
como es algo extremadamente dificil de encontrar, me quedaré sólo:-( pero
prefiero eso a convivir con alguien que no esté completamente "en sintonía"
conmigo.
Un Abrazo:
Estábamos bromeando Nennito. Me parece que tenemos un esquema parecido ante
esto, supongo que por nuestra cultura es decir monógamos mientras dure el
sentimiento de unión en la libertad condicionada por todo lo demas.
Si buscas una pareja compatible la podrás encontrar. No hace falta ser tan
extremista, completamente en sintonía pudiera ser más que aburrido. Si en lo
que sea substancial para ti y la otra persona, cuestión de prioridades, pero
las cosas tienen la importancia que le demos y en las pequeñeces no hay que
hacer caso.
Otro abrazo.
a.
"Nennito" <Nen...@UNTARANTANTANya.com> escribió en el mensaje
news:b1gdd5$afu$1...@nsnmpen2-gest.nuria.telefonica-data.net...
Amelia
poco por eso ante la duda a ese OFF TOPIC la próxima vez habría que ponerle
una interrogante ? y todos tan contentos. Ojalá.
No se te ocurra privar a tus amigos del alma, de esas u otras historias
evitadoras. Como no disfrutar de tan buen regalo.
Los muerdos tan bien hechos tampoco están mal.
B.
a.
"Pseoane" <na...@nada.com> escribió en el mensaje
news:b1gf1g$12tjtm$1...@ID-151147.news.dfncis.de...
Pseoane
En vista del escaso, interés que ha despertado el viaje a Chinchilla de
Mariví-Pseoane, mi señora ha presentado las Promociones de Invierno Pseoane
2003.
Promoción Temporada Baja
Salida viernes por la tarde. Regreso el domingo después de comer.
Incluye: ataque de nervios la primera noche, un discurso de Azaña y dos
horas de paseo nocturno a tres grados bajo cero. Torcedura de tobillo y
cólico hepático, opcionales. Relato de 2500 palabras. (Bono de fidelización:
5 puntos).
Promoción Semana Santa
Salida Miércoles. Regreso domingo después de comer
a) Normal: Dos ataques de nervios. Dos discursos de Azaña. Dos capítulos de
"El espejo de Mar". Puesta en escena de "mi madre me llevó de pequeño a una
colegio de niñas" (rigurosamente verídico). Crisis alérgica, opcional. (Bono
de fidelización: 10 puntos).
b) Luxe: Un ataque de nervios. Dos crisis de ansiedad. Una taquicardia. Dos
mareos leves. Torcedura de tobillo. Dos discursos de Azaña a elegir,
disertación sobre la importancia del Pacto de San Sebatián en la formación
del gobierno provisional de la II República, anecdotario sobre los gobiernos
Alcalá Zamora y siguientes hasta Casares Quiroga. Representación de "Mis
hermanos no eran huérfanos pero mi madre los metió en un orfanato"
(rigurosamente verídico). Disertación sobre "Qué graciosos éramos en el
colegio mayor", y "Mi vida en México". (Bono de fidelización: 15 puntos).
c) Extra-Luxe: Un ataque de nervios. Dos crisis de ansiedad. Un ataque de
pánico. Cólico con ingreso en centro sanitario, opcional. Representación
íntegra de las piezas: "Aunque no te lo creas, así fue mi infancia", "Lo que
mi psiquiatra piensa de mí y no se atreve a decirme", "Mi vida profesional"
(12 capítulos), y la pieza que ha triunfado en los mejores los dormitorios
nacionales y extranjeros: "El día que mi madre me compró unos pantalones de
cuero rojo con peto y tirantes, durante la Semana de El Tirol en el Corte
Inglés, y lo que sucedió el primer día que fui al colegio del barrio vestido
así, y con unas gafas negras de mi abuelo" (Rigurosamente verídico). (Bono
de fidelización: 25 puntos)
En todos los viajes, Pseoane se suministra con el siguiente kit:
Tarjeta de la Seguridad Social
Tarjeta de Asisa
Tarjeta de asistencia médica de la Asociación de la Prensa
Tranxiliums y Seroxat para cuatro días
Urbasón inyectable
Vendas
Desinfectante
Placa metálica con identificación por si se pierde.
Seguro Daños a terceros (Todo riesgo, opcional)
Valle
Lo de los pantalones rojos bien merece la pena el resto.
Tengo varias dudas:
1) ¿todo el viaje es con Pseoane incluido o hay algún día libre?
2) Las representaciones están programadas para el mismo día o por el
contrario se irán sucediendo en el tiempo.
3) La misma pregunta para ataques, colicos, y demás
4) ¿Esta incluido en los gastos el transporte al centro hospitalario?
5) ¿Hay seguro de vida para el cliente? ¿En caso de necesitar ser ingresado
tras las representaciones, se hace cargo la compañía de los gastos?
6) ¿Los bonos se podrán usar en otro viaje sin Pseoane o va incluido en el
lote?
En espera de sus noticias...
"Pseoane" <na...@nada.com> escribió en el mensaje
news:b1h33r$12uq0l$1...@ID-151147.news.dfncis.de...
Pseoane
Me es grato responder a su preguntas.
> 1) ¿todo el viaje es con Pseoane incluido o hay algún día libre?
Es usted quien decide cuánto tiempo ha de permanecer en compañía de Psoane.
Puede usted disponer de todo el tiempo libre que precise en cualquier
momento. Sin embargo, no se admiten reclamaciones por aquellas actividades
programadas que no puedan llevarse a cabo debido a la ausencia de la persona
contratante.
2) Las representaciones están programadas para el mismo día o por el
contrario se irán sucediendo en el tiempo.
El programa de actividades previsto para cada modalidad de contrato cubre
prácticamente la duración completa del viaje, aunque la contratante puede
optar por las versiones de reducidas. Debe tener en cuenta que, por la
propia naturaleza de las actuaciones, la duración de éstas depende también
de circunstancias tales como la cantidad y tipo de ropa que lleve usted
puesto en cada momento, la estancia de la casa que estén ocupando (baño,
cocina, salón, dormitorio, terraza, etc).
>3) La misma pregunta para ataques, colicos, y demás
De acuerdo con nuestra política de ofrecerle a la cliente el estímulo de la
sorpresa, los percances sanitarios pueden producirse o no, y, en el primer
caso, podemos garantizarse que acaecerán en el momento más inoportuno de la
estancia.
> 4) ¿Esta incluido en los gastos el transporte al centro hospitalario?
Sí, pero no su gestión y administración, que corren a cargo de la cliente.
Los gastos derivados de evacuación urgente o traslados a centros de urgencia
serán reembolsado al término del viaje siempre que se justique con los
correspondientes informes médicos.
> 5) ¿Hay seguro de vida para el cliente? ¿En caso de necesitar ser
ingresado
> tras las representaciones, se hace cargo la compañía de los gastos?
Sí, pero como se indica la oferta de promoción, la subscripción de esta
póliza suplementaria es opcional y se factura aparte.
6) ¿Los bonos se podrán usar en otro viaje sin Pseoane o va incluido en el
> lote?
No, puede usted usar lo bonos con quien usted prefiera.
Atentamente
Exuperancia MirayBete,
Departamento comercial
"Valle" <VAL...@telefonica.net> escribió en el mensaje
news:b1hiu8$1323pq$1...@ID-176563.news.dfncis.de...
Valle
Contestando al punto 2 de su respuesta a la mía, me gustaría que me
orientara acerca de qué tipo de ropa es más conveniente y adecuada para las
actuaciones. Es la primera vez que voy a hacer un viaje de este tipo y no
quiero estar fuera de lugar.
Con respecto a su contestación a mi pregunta numero 3, yo pensé que
contrataba todos los percances; en caso de que éstos no se produzcan o solo
se produzcan algunos ¿me devolveran parte de lo abonado?
Por lo que se refiere al apartado 5, en todos los viajes de alto riesgo, y
este es el caso, en el precio se incluye el seguro de accidentes y de vida
para el cliente contratante. Por lo que, le ruego reconsidere este punto.
Sin más por el momento y en espera de sus noticias, le saluda atentamente,
"Pseoane" <na...@nada.com> escribió en el mensaje
news:b1hn4c$11ods8$1...@ID-151147.news.dfncis.de...
Pseoane
> orientara acerca de qué tipo de ropa es más conveniente y adecuada para
las
> actuaciones.
A la vista de su ficha de cliente, le aconsejamos un modesto hábito
monástico: tal vez de las Clarisas, o de las Hermanas Raparadoras. Si
prefiere algo más informal, también le iría estupendamente el uniforme de
Santas Sin Fronteras, que incluye alegres y llamativos accesorios, como
niños lisiados, pobres depauperados, ancianos abandonados y huertanos en
celo.
>Es la primera vez que voy a hacer un viaje de este tipo y no
> quiero estar fuera de lugar
No se inquieta querida amiga. Tenga usted por seguro que será el lugar el
que esté fuera de usted.
Los demás interrogantes que usted plantea ya están ampliamente explicados en
el contrato de servicios y en el folleto informativo.
Atte.
Exuperancia Mirabete
"Valle" <VAL...@telefonica.net> escribió en el mensaje
news:b1ho44$136e9o$1...@ID-176563.news.dfncis.de...
Judas
> Tribulete's News <na...@nada.com> (Pseoane)
>
>
> CAPÃ TULO I
> ----------------
> La muerte sabe a ajo mataero
> ----------------
>
> El tren regional de Valencia a Chinchilla es de una puntualidad
> sorprendente. Siempre llega veinte minutos tarde; ni uno más ni uno menos.
> Es tan de fiar que hasta el encargado del tanatorio pone su reloj en hora
> cuando escucha frenar a la locomotora.
>
> La verdad es que la clientela mortuoria nunca se le ha quejado por
> cuestiones horarias, pero al encargado siempre le han gustado las cosas
> formales. Es un hombre serio, que se toma a pecho su trabajo. "Si aquà se
> pasa la última hora en este mundo, por lo menos que sea la hora exacta",
> ...
...
También me asusta decirlo. No acierto a saber qué exactamente. Pero yo
también me encuentro en una situación curiosa, a las seis menos cuarto de
la mañana de un sábado descubriendo en internet que hay algo llamado
grupos de noticias de donde se pueden conseguir fotos pornográficas de una
variedad enorme. Y la verdad es que me siento como un cura. No como uno
cualquiera, sino como el que se encontró con las carantoñas de Mariví en
forma de esta historia, que lo sorprendieron y violentaron y finalmente
dejaron un magnífico sabor de boca. Ahora que lo pienso, parte de lo que
quería decir es que me encantaría pagar la cena como hizo el cura a quien
me ha sorprendido tan gratamente (usease:pseoane y supongo que quien le ha
inspirado y quien lo ha difundido). Aún sintiendome como el cura por
momentos lo que de verdad me sucede es que estoy esperando el beso que me
evite seguir con el discurso de Azaña, al que he comenzado a añadir los de
Fidel Castro, y aunque ese beso no ha llegado a veces siento el pinchazo
de la peineta en la pierna.
Muchas gracias por hacerme pasar tan buen rato. Un abrazo
Mariví
etc...
;-)
"Pseoane" <na...@nada.com> escribió en el mensaje
Nennito
news:b1gf1g$12tjtm$1...@ID-151147.news.dfncis.de...
> En otro sentido, el relato que aquí ha traido Amelia es, modestia aparte,
> una perfecta, aunque humorística, descripción de lo que es
psicológicamente
> una "estrategia de evitación", asunto directísimamente relacionado con las
> neurosis y las depresiones. Si te lo lees, y parece que lo has leido,
verás
> cómo se describen las maniobras de un neurótico aterrado por la
> representación del objeto temido.
Pues no José, como le acabo de contestar a maldecido, no he leido nada más
que las primeras lineas del primer capítulo de este cuento, que tengo que
reconocerlo, he pasado de el porque no me interesa lo más mínimo. Yá sabes
que yo lo que no es realista......
Pero bueno, diré lo que decía un jefe mío que tuve cuando trabajé de
operador en un cine hace muchos años que decía a veces para salir del paso
cuando le preguntaban que que tal era una película: "Pa quien le guste, esta
bien".
Un Abrazo:
Nen...@UNTATARANTANTANya.com
Nennito
news:b1gfk3$136v35$1...@ID-113306.news.dfncis.de...
> Cada cual se consuela como puede, y así debe ser. Tan legitima e
inteligente
> pudiera ser tu actitud como la de Pseoane u otras, solo que hay maneras de
> llevar la vida y sus pesares que son muy de agradecer para la mayoría no
> masoca,
Yo como sabes, no tengo nada de masoca Amelia, pero tampoco tengo ningún
sentido del humor tengo que reconocerlo.
Un Abrazo:
Pseoane
> bien".
¡Eso es! Justo es eso lo que se busca, que cada cual disfrute con lo más le
guste, sin molestarse porque al compañero de al lado no le guste lo más
mínino.
Un abrazo
jose
"Nennito" <Nen...@UNTARANTANTANya.com> escribió en el mensaje
news:b1j3hj$3mc$1...@nsnmpen2-gest.nuria.telefonica-data.net...
Amelia
"Judas" <ser_zar...@hotmail.com> escribió en el mensaje
news:pan.2003.02.02....@hotmail.com...
Hola Judas, yo también quiero agradecerte el que te hayas asomado si quieres
a esta tu casa. En este ciber-espacio hermoso por su pluralidad tan real
como la vida misma a veces ocurre, te das un paseo sin propósito definido y
pasas un buen rato gracias a personas que a mi me parecen muy especiales
como poco.
Tu también lo eres puesto que de algún modo te has sentido inmerso y como
parte de una vivencia, real o no, es lo de menos. La hora tambien. Me doy
cuenta que estoy yendo y viniendo a la cocina, pronto será la hora de la
comida y ando entre pucheros a la vez que te digo que también tu has dejado
huella entre los que te hemos leido. Que también me gustaría ser comensal de
tu cena simplemente para compartir contigo ese buen rato.
Aquí esto es una especie de festín de los sentimientos, a veces encontrados,
otras coincidentes por exceso o por defecto, pero siempre cargados de amor.
A la vida también aunque a veces no lo parezca.
Un abrazo Judas.
a.
Nennito
news:MPG.18a5d89b3...@News.CIS.DFN.DE...
>
>
> Totalmenete de acuerdo Nennito pero como cada vez hay más gilipollas,
> que no subnormales, pues lo de sintonizar creo que habrá que conformarse
> con la radio.
No creas Juan no creas...... Aunque no es lo habitual, he conocido
personalmente parejas, que están hechos digamos "el uno para el otro" y por
supuesto en perfecta "sintonía"
Una de ellas con la que hice cierta amistad hace unos cinco o seis años, en
una playa nudista. Estube incluso en su casa en un par de ocasiones, y era
una pareja superenrrollada, que acudían según me dijeron, a locales de
intercambio de parejas.
Por cierto: Me intentaron convencer para introducirme en ese mundo, pero yo
nunca me atreví a ir con ellos a ningún lokal de intercambio, aunque en el
fondo lo estaba deseando ya ves: No fuí yo mismo en aquella ocasión, y más
tarde lo he lamentado. Si me saliera una ocasión así ahora.....
Conmigo se entendían bastante bien, ya que tenían una forma de pensar muy
parecida a la mía, pero después ya se trasladaron de aquí, y no volví a
saber nada de ellos.
Pero bueno a lo que vamos: El caso es que esta pareja, eran uno para el
otro, como ellos mismos reconocían. A ella le gustaba lo mismo que a el, he
incluso en la playa, me fijaba yo en el detalle, de que decidían irse al
mismo tiempo los dos, sin decir nunca lo clásico de ¿Nos vamos ya? o algo
parecido.
También esta en perfecta "sintonia" por ejemplo la pareja que vive debajo de
mi piso. En 13 años que llevo yo viviendo en el piso, jamás les he oido la
más mínima discusión, y se les vé en la cara, que es una pareja totalmente
feliz.
Por lo tanto Juan, "la sintonía" no es sólo cosa de las arradios, he
comprobado esto personalmente sinó no lo creería.
Claro que cuanto más "raras" somos las personas y nuestros gustos, valores
etc, se alejan más de la mayoría, más dificil es encontrar una persona "en
sintonía" con nosotros, pero esto es otro tema.
Un Abrazo:
Nen...@UNTARANTANTANTANya.com
Amelia
No lo sé. No creo que seas masoca, me estaba refiriendo en general a los
muchos que buscamos ese buen rato siempre que sea posible. Supongo que tu
también lo haces pero a tu gusto y manera como todos.
Pudiera ser Nennito esto que dices, pero también lo contrario. Creo que no
siempre me reconozco en la palabra del otro lo que me hace pensar que quizá
no estamos tan cualificados ni nos conocemos tanto como creemos a nosotros
mismos.
Como veras yo siempre tan segura de todo.
Un abrazo.
a.
"Nennito" <Nen...@UNTARANTANTANya.com> escribió en el mensaje
news:b1j3o7$5c0$1...@nsnmpen2-gest.nuria.telefonica-data.net...
Pseoane
> evite seguir con el discurso de Azaña, al que he comenzado a añadir los de
> Fidel Castro, y aunque ese beso no ha llegado a veces siento el pinchazo
> de la peineta en la pierna.
> Muchas gracias por hacerme pasar tan buen rato. Un abrazo
Todos estamos siempre esperando ese beso, supongo. Es lo malo que tienen,
que en cuanto se ha apagado el eco de un beso ya estás deseando otro. Pero
se encuentran, vaya que sí se encuentran. Lo que pasa es que hay dejárselos
dar, que no siempre sabemos.
En cuanto a la utilidad de los discursos para huir de que lo que temo, es
decir para huir de lo que más deseo y por eso me da miedo, yo he probado con
Castelar, Py y Margall, Alcalá Zamora, Maciá, Melquíades Alvarez... y nada,
desengáñate, lo mejor es Azaña y Prieto; especialmente el Prieto exiliado.
El mejor discurso de Azaña: el último. El de las tres Pes: Paz, Piedad y
Perdón. Lo malo de ése es que ni beso ni leches, te pasas la noche llorando.
En fin, hermano, que si te he hecho pasar un buen rato me doy por muy bien
pagado, y prometo reincidir si vuestro tiempo y paciencia lo permite.
Un abrazo, y bienvenido a estos lares (que, a veces, parecen lagares)
Jose, Pseo o como prefieras, que ni yo mismo sé ya como me llamo.
"Judas" <ser_zar...@hotmail.com> escribió en el mensaje
news:pan.2003.02.02....@hotmail.com...
Nennito
> Pudiera ser Nennito esto que dices, pero también lo contrario. Creo que no
> siempre me reconozco en la palabra del otro lo que me hace pensar que
quizá
> no estamos tan cualificados ni nos conocemos tanto como creemos a nosotros
> mismos.
Pues yo estoy completamente seguro, en que me conozco muy bien a mí mismo, y
así mismo sé y reconozco, que no valgo nada ni para nada, por eso no me
aguanto a mí mismo, porque me conozco demasiado bien:-(((
Judas
> "Amelia" <amelia.en...@terra.es> escribió en el mensaje
> news:b1j6g5$13qbo9$1...@ID-113306.news.dfncis.de...
>> Pudiera ser Nennito esto que dices, pero también lo contrario. Creo que no
>> siempre me reconozco en la palabra del otro lo que me hace pensar que
> quizá
>> no estamos tan cualificados ni nos conocemos tanto como creemos a nosotros
>> mismos.
>
>
> Pues yo estoy completamente seguro, en que me conozco muy bien a mà mismo, y
> asà mismo sé y reconozco, que no valgo nada ni para nada, por eso no me
> aguanto a mà mismo, porque me conozco demasiado bien:-(((
> Un Abrazo:
>
> Nen...@UNTARANTANTANya.com
>
> --
> Encuéntrate y sé tú mismo
> recuerda que no hay nadie como tú.
> (Dale Carnegie)
Desde luego que te conoces tú a ti mismo mejor que lo que yo te conozco,
pero no me creo que te puedas conocer tan bien. A veces uno se sorprende
de sí mismo.
--
Judas
Sólo un amigo te puede traicionar.
ibn
Hola Judas, has leido mis dos mensajes en respuesta a tu pregunta sobre
la FTP. Si los has leido un acuse de recibo, será bienvenido.
Un saludo
Juan
In article <pan.2003.02.03....@hotmail.com>,
ser_zar...@hotmail.com says...
antavian
las discusiones y te callas y tragas para que no se aleje de ti.
En todo el mundo cuecen habas.
--
la imaginación es el mayor poder que existe.
"Nennito" <Nen...@UNTARANTANTANya.com> escribió en el mensaje
news:b1j5h9$icf$1...@nsnmpen2-gest.nuria.telefonica-data.net...