Ya dije que el interés de Cruise en esta producción es puramente
oportunista y estratégico. Es una inversión en un hipotético futuro,
en que algún día Cienciología cole en la sociedad alemana. En un día
en que se consideren estas acciones correctas.
Esta es una crónica de alguien que a sabiendas o no, está dando alas a
la secta
Fuente.- El Pais, España
Enlace.-
http://www.elpais.com/articulo/cultura/clave/secreta/Valkyrie/elpepicul/20080116elpepicul_3/Tes
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REPORTAJE
La clave secreta de 'Valkyrie'
El lado esotérico del hombre que quiso matar a Hitler explica el
interés de Tom Cruise por encarnarlo
JA - Barcelona - 16/01/2008
Berlín, Stauffenbergstrasse, antigua Bendlerstrasse. La tranquila
calle conduce hasta el Bendlerblock, un sobrio y marcial edificio gris
pánzer donde se consumó el gran drama que narra el filme Valkyrie, de
Bryan Singer, cuyo estreno está previsto para octubre. A través de una
puerta con reja se accede al sombrío patio donde en la madrugada del
21 de julio de 1944 cuatro de los oficiales alemanes involucrados en
la fallida conspiración para matar a Hitler, entre ellos el autor
material del atentado, su inspirador y motor, el coronel Claus Schenk
von Stauffenberg, de 37 años, fueron fusilados. El lugar, pese a su
limpia geometría, los cuidados arbolitos -de uno incluso pende una
casita para pájaros- y la desconcertante escultura de bronce de un
hombre erguido desnudo, emplazada en honor de la Resistencia alemana,
conserva un aire siniestro.
Estos muros, este constreñido escenario, fue lo último que vio,
deslumbrado su único ojo por los fogonazos de los fusiles, uno de los
hombres más nobles, carismáticos y valientes de Alemania, capaz de
meterse en la guarida de la fiera tuerto, manco de la mano derecha y
con sólo tres dedos de la izquierda, e intentar abatirla.
Fue Stauffenberg, que el pasado 15 de noviembre hubiera cumplido cien
años, lo que se dice un héroe. No es extraño que Tom Cruise haya
querido encarnar al atractivo -pese a las mutilaciones sufridas en
Túnez, con el Afrika Korps- y valeroso coronel suabo. Pero hay otras
razones más allá de las obvias. El intérprete, activo miembro de la
Iglesia de la Cienciología, ha podido ver en el conde Stauffenberg a
un colega espiritual. Y es que, efectivamente, aparte de ser el
brillante oficial de Estado Mayor que tuvo en su mano maltrecha el
destino de Alemania, el recto y caballeroso soldado, el esposo y padre
amantísimo, el extraordinario jinete, el intérprete de violonchelo y
el devoto católico, Stauffenberg tiene una faceta mucho menos conocida
(e inquietante) como seguidor incondicional de un maestro, un
verdadero guru, cuyas enseñanzas y normas marcaron hasta el final su
existencia: el célebre poeta alemán Stefan George.
La relación con George de Stauffenberg y sus dos hermanos, los gemelos
Berthold (ejecutado también a raíz del complot del 20 de julio) y
Alexander, fue una experiencia crucial, seguramente la definitiva en
sus vidas. El poeta, al que denominaban el Maestro, fue la gran
influencia que determinó sus comportamientos y carreras. Stefan
George, cuyo ideario iba mucho más allá de la literatura y el arte
para convertirse en una doctrina moral y en una especie de religión -
la palabra secta viene indefectiblemente a la cabeza ante su grupo de
discípulos e iniciados, el Georgekreis, el Círculo de George, del que
formaron parte otros tiranicidas del 20-J-, fue considerado por sus
selectos seguidores poco menos que un oráculo y un sacerdote, un
magus.
No es difícil compararlo en algunos aspectos con Gurdjieff. Los nazis
trataron de arrastrarlo hacia ellos -había elementos muy cercanos en
su mensaje de renovación nacional, pangermanismo, autosacrificio y
heroísmo e incluso el uso primerizo de la esvástica-, pero George era
demasiado elitista y parece que le desagradaban sinceramente las
expresiones vulgares y populistas del régimen (como repugnaron a
Stauffenberg).
Entre lecturas poéticas, mucho Hölderlin y mucho suspiro por los
Hohenstaufen, enseñanzas esotéricas y reflexiones estéticas con un
tufillo rosacruciano y teosófico, se acuñó en el Georgekreis el
concepto y la expresión Geheime Deutschland, Alemania Secreta, la idea
de que el grupo de selectos iniciados podía encarnar el viejo mito
alemán de la Nación durmiente, los héroes ocultos, los custodios, los
guerreros místicos que conservarían la esencia intelectual y moral de
la sagrada patria durante tiempos difíciles. En un hombre con el
pedigrí de Claus von Stauffenberg puede imaginarse el efecto de la
combinación de semejantes ideas con su bagaje familiar de honor,
pathos militar y sentimiento de clase. Stauffenberg bautizaría luego
al grupo de conspiradores contra Hitler con el nombre de Alemania
Secreta.
Tras la muerte de George en 1933, los Stauffenberg se convirtieron en
sus herederos, y, como recalca el mejor biógrafo de Claus, el
historiador Peter Hoffmann (Stauffenberg, a familiar history,
1906-1944, Cambridge University, 1995), permanecieron comprometidos
con la Alemania Secreta y ello les impulsó en su momento a la acción
contra Hitler. El atentado no fue, entonces, sólo un acto político
sino que tuvo una componente de autosacrificio heroico y de expiación
por los crímenes de toda una nación. Se entiende que esta vertiente
esotérica de la conjura posea un atractivo irresistible para Tom
Cruise.
Hay más: El selecto círculo de George, estrictamente masculino y con
un culto desaforado a la belleza -los hermanos Stauffenberg eran
insultantemente guapos-, levantó en su día sospechas de
homosexualidad. Se dice que George, que se había apasionado por un
jovencito de 12 años, inspiró a Thomas Mann el personaje de Aschenbach
de Muerte en Venecia.
Existe un libro popular (y muy sugerente) sobre las conexiones
esotéricas de Stauffenberg que muy bien puede haber sido la conexión
de Cruise con el asunto. Se trata de Secret Germany, Stauffenberg and
the mystical crusade against Hitler (Jonathan Cape, 1994), de Michael
Baigent y Richard Leight, los autores, nada menos, de The Holy Blood
and the Holy Grail, el libro que fue fuente de inspiración para El
Código Da Vinci.
El poderoso ascendente de George sobre Stauffenberg es incontestable.
Hoffmann recalca en su biografía cómo el recuerdo de George aparece en
los momentos fundamentales de la vida del oficial y cómo este tenía el
hábito de recitar sus poemas "con mensaje" ante los demás. Lo hizo muy
a menudo en el círculo de conspiradores contra Hitler. Puro Stefan
George fue su postrer grito ante el pelotón de fusilamiento: "¡Larga
vida a nuestra sagrada Alemania!". En uno de sus escasos dedos, el
coronel Claus Schenk von Stauffenberg llevó hasta el fin un anillo de
oro con una frase de George: "Finis initium".
--------- fin ---------
Saludos