Como Sobreviviremos? Nuestro Poder para Bendecir

30 views
Skip to first unread message

Melba Grullón Ubiñas

unread,
Dec 12, 2007, 10:17:47 AM12/12/07
to Melba Grullón Ubiñas

 
(Articulo anexo) 
 
 
¿Cómo Sobreviviremos?
- Nuestro Poder para BENDECIR -
                        
“El que se mantenga firme hasta el fin, se salvará” (Mt. 10:22)
 
Recientemente asistí a una Conferencia muy interesante sobre “Cambio Climático y el Mensaje Extraterrestre” donde el conferencista se esmeró con excelencia explicando con muchos detalles, fotos, reportajes y videos los evidentes cambios climáticos que están sucediendo en nuestro planeta.
 
También presentó pruebas –mediante imágenes- y su propio testimonio sobre la presencia en nuestro planeta de seres extraterrestres. Informó sobre el contacto que muchas personas ya han tenido con ellos y el mensaje de “alerta” que estos seres han entregado de distintas formas, en muchos lugares del mundo.
 
Una pregunta de un asistente a dicha conferencia ha motivado este artículo. Este señor ya parecía convencido de lo que veía y escuchaba. Parece haber comprendido muy bien que ciertamente estamos frente a cambios climáticos que evidentemente están transformando nuestro mundo y también se veía muy convencido de la existencia de nuestros hermanos mayores y sus visitas. La pregunta que entonces él hizo fue “¿Y cómo sobreviviremos a toda esta transformación del Planeta?”.
 
 
La respuesta del conferencista me pareció acertada. El contestó que los seres humanos influimos en el medio ambiente por medio a nuestros pensamientos y que entonces siendo positivos y pensando en que todo va a estar bien, influiremos en que todo este bien. Dijo que para contrarrestar lo negativo que pueda suceder debemos  amarnos los unos a los otros, vivir en armonía y pensar positivo.  Desde esa noche he estado pensando en la sencillez de esa respuesta.  ¿Es así? 
 
El Proceso de Limpieza de la Tierra
 
En muchas de las conferencias, programas de televisión y escritos que vemos nos explican el cambio climático enfocado mayormente en catástrofes y desastres naturales, y la mayoría de las personas que están explicando esto a la humanidad les dicen que la causa es la cantidad de gases de efecto invernadero que esta siendo enviada a la atmósfera. Con esta explicación, la gran masa se siente impotente pensando en que no somos capaces de hacer nada al respecto, y que solo deben tomar medidas correctivas los gobiernos y las grandes industrias productoras mayoritarias de estos gases.
 
Nos hablan de “proyectos contra el cambio climático” y de “grave crisis de calentamiento global del planeta”, provocando que mucha gente se llene de miedo, sienta pánico por esta realidad y no sepa que hacer al respecto.
 
¿Qué podemos todos hacer?
 
Propongo que recordemos que el Maestro Jesús dijo “Ustedes harán cosas aun más grandes”, refiriéndose a los milagros que el hacía.  Entonces, si Jesús pudo calmar la tempestad con tan solo pedirle que calmara, ¿Por qué dudamos que nosotros podemos hacer lo mismo que Él?  El dijo “Pidan y se les dará; busquen y hallaran; llamen y se les abrirá la puerta.  Porque el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y se abrirá la puerta al que llama.  ¿Acaso alguno de ustedes daría a su hijo una piedra cuando le pide pan? (Mt, 7:7-9)
 
“En verdad les digo:  Si tuvieran Fe, del tamaño de un granito de mostaza, le dirían a este cerro:  Quítate de ahí y ponte mas allá, y el cerro obedecería.  Nada sería imposible para ustedes”. (Mt.17:19)
 
Entonces, ¿Por qué temer? ¿Es que hemos olvidado que tenemos el poder para BENDECIR?  Me llevó mucho a la reflexión en estos días la actitud de una señora a la cual al comentarme de que el agua estaba llegando un poco sucia a su casa y sentía miedo hasta de bañarse, yo le recomendé “Bendiga el agua para que se limpie, y así se bañaría con agua bendita” y ella reaccionó sumamente sorprendida.  “Yo bendecir el agua?! Yo?” me dijo.
 
Le expliqué que del mismo modo que le decimos a un bebé “!Que Dios te bendiga!”, de ese mismo modo podemos bendecir el agua, nuestros alimentos, y todo lo que es, en el nombre del Cristo que tenemos dentro, en el nombre de nuestro Padre.  Ella concluyó la conversación como si estuviera acongojada por no haber meditado en esto antes: “Nunca antes me habían dicho que yo tengo el poder de bendecir el agua”. 
 
Le pregunté “¿Cree que Dios esta dentro de usted?” y me responde que si.  Entonces le digo “¿Y porqué le pone límites a lo que puede bendecir?”.
 
Sin embargo, una niña me hizo un comentario parecido sobre el agua y le dije lo mismo “Bendice el agua para que se limpie y así te bañas con agua bendita”.  La reacción fue muy distinta “¿En serio?  ¿Yo puedo bendecir el agua?”.  Claro que puedes, Dios esta en ti. “!Que bueno!  ¡Puedo bendecir el agua!!”.  ¿La diferencia?  La niña no dudó, no dijo “pero es que nunca antes me habían dicho”, simplemente se alegro con oír esto.  Comprendí en este momento porque Jesús dijo que para entrar en el Reino de los Cielos, tenemos que ser como niños. Y es que los niños no se han llenado de tantas dudas como los adultos y aceptan mas fácil sus dones y talentos.
 
Recordemos a los ciegos cuando le pidieron a Jesús que tocara sus ojos para poder ver y Él les dijo "¿Creen que puedo hacerlo?" Ellos le contestaron: "Sí, Señor". Entonces les toco los ojos, diciendo: "Que se haga en ustedes conforme a su Fe".
 
Entonces, usemos este maravilloso poder que nuestro Padre nos ha dado, de que “se haga en nosotros conforme a nuestra Fe”, para Bendecir a nuestra Madre Tierra.  Vamos a bendecir este proceso de limpieza, de grandes cambios, para que sea lo menos doloroso posible, tanto para ella como para nosotros sus habitantes. Vamos a bendecir nuestras aguas, el aire que respiramos, los alimentos que tomamos, nuestros cuerpos, a nuestras familias, vecinos, amigos y enemigos. Vamos a bendecir toda situación de aparente conflicto para que se transmute hacia una situación de paz. Vamos a pedir, en armonía para todo el mundo, bajo la gracia y de manera perfecta.
 
Elevemos nuestros ojos al cielo y pronunciemos nuestras bendiciones, tal como Jesús solía hacerlo. Como cuando multiplicó los panes y los peces para alimentar a miles de personas. “Tomó los cinco panes y los dos pescados, levantó los ojos al cielo, pronunció la bendición, partió los panes y los entregó a los discípulos.  Comieron cinco mil hombres, sin contar mujeres y niños y sobraron doce canastos llenos”. (Mt. 14:19). “Ustedes pueden ser como Yo!”
 
  
Hermanos Mayores ¿Para qué vienen ahora?
 
Noté que muchas personas que asistieron a la conferencia se preguntaban ¿Qué tiene que ver el cambio climático con la presencia de seres extraterrestres?   El conferencista explicó que hay seres que han estado dando alertas sobre muchos cambios en nuestro planeta y el Universo.
 
Ciertamente, nuestros hermanos mayores nos han dado mucho más que alertas.  Gracias a ellos, son muchos los grupos y personas de manera individual que han estado recibiendo enseñanzas sumamente valiosas para estos tiempos y los tiempos por venir. Muchas de estas enseñanzas se encuentran en textos que están disponibles para todos a través de la Internet. Como por ejemplo las Bitácoras Fénix, que pueden encontrar en la página www.bitacorasfenix.org.
En nuestras Biblias se mencionan mucho las “Huestes del Cielo”, los Ángeles, mensajeros de Dios, así que estos seres de otros mundos han estado presentes en nuestra historia desde hace mucho tiempo.
 
Jesús dijo que “enviará a sus Ángeles, que tocarán la trompeta y reunirán a los elegidos de los cuatro puntos cardinales, de un extremo al otro del mundo”. (Mt. 24:31).  Podemos pensar entonces que nuestros hermanos mayores están muy presentes en estos momentos de cambios en nuestro planeta para asistirnos; como una “Fuerza de Salvación”.
 
¿Qué hacen los hermanos mayores?  Ofrecen guía y asesoría a los menores y los ayudan a aprender de sus propias experiencias.  Por ejemplo, en nuestros hogares, solemos pedirles a nuestros hijos mayores que ayuden a los menores con sus tareas.   Si uno es diestro en el uso de nuevas tecnologías, disfruta traspasando ese conocimiento a sus hermanos menores.  Además de conocimientos, también se comparten libros, ropas, juguetes, etc.
 
Si nosotros, como padres terrestres, solemos fomentar esta relación entre nuestros hijos mayores y menores, ¿Nuestro Padre divino hará lo mismo entre sus hijos? Seguro que si.
 
Entonces, vamos a bendecir a nuestros hermanos; a darles las gracias por su presencia benévola y estemos abiertos para aprender las maravillas que ellos nos pueden enseñar. 
 
Amor, Paz y Luz. Yo Soy Melba.
 


El Vuelo de las Aguilas, Renovarse o Perecer



El Vuelo de las Aguilas, Renovarse o Perecer
Como Sobreviviremos-Nuestro Poder de BENDECIR- Melba - Dic.2007.doc
Reply all
Reply to author
Forward
0 new messages